La Iniciativa de Moneda Digital del Instituto Tecnológico de Massachusetts ha revelado un nuevo "Esfuerzo de Seguridad y Software de Bitcoin" destinado a fomentar la investigación para reforzar las defensas de la red Bitcoin.

La iniciativa de código abierto ha recibido el apoyo de un grupo diverso de líderes de la industria de las criptomonedas, entre los que se encuentran Cameron y Tyler Winklevoss de Gemini, el director general de MicroStrategy, Michael Saylor, el director general de Square, Jack Dorsey, y el principal gestor europeo de activos digitales, CoinShares.

En una entrada del blog en la que se presenta el proyecto, DCI afirma que el ascenso de Bitcoin desde un "sombrío juguete criptográfico" hasta una red robusta que "asegura un valor del orden de 1 [billón] de dólares" se debe a los millones de horas invertidas en la construcción del proyecto por desarrolladores de código abierto.

Coinshares anunció una donación de 500,000 dólares al proyecto y su director ejecutivo, Jean-Marie Mognetti, insinuó que quizás otras empresas de criptomonedas deberían hacer lo mismo:

"Como beneficiario del trabajo de cientos de desarrolladores que aseguran, actualizan y mantienen los protocolos de código abierto que subyacen a la red Bitcoin y a las aplicaciones construidas sobre ella, creemos que las empresas con ánimo de lucro del sector de los activos digitales tienen la obligación de financiar los esfuerzos de desarrollo independientes y neutrales y la investigación que avanza en el interés mutuo de todos los participantes del ecosistema."

El programa de investigación y desarrollo de cuatro años de la DCI tiene como objetivo "reforzar la red Bitcoin y administrar el compromiso de la industria para financiar el software de código abierto".

La entrada del blog señalaba que "el objetivo del nuevo programa de DCI es contribuir con recursos neutrales y expertos para mejorar la solidez del protocolo Bitcoin. La seguridad de Bitcoin es fundamental para la continua evolución de la tecnología subyacente, así como para la amplia realización de las promesas de bien público de las monedas digitales".

En el artículo se enumeran varias cuestiones clave que el MIT está explorando, como el mantenimiento de un equipo de desarrolladores de Bitcoin, la exploración de nuevos lenguajes de programación y las investigaciones preventivas contra posibles ataques.

El MIT también hizo hincapié en la necesidad de que la seguridad de la red crezca y se fortalezca junto con la creciente adopción, señalando el desafío asociado a la coordinación de una red descentralizada:

"A diferencia de los activos tradicionales, Bitcoin es un software que funciona en una red descentralizada. La seguridad de Bitcoin se basa en la precisión y solidez del software y el hardware que lo ejecuta, y en las acciones de quienes participan en la red."

En julio de 2020, el investigador de DCI James Lovejoy advirtió que los intentos de ataques del 51% —intentos de capturar una parte mayoritaria de los nodos y, por tanto, el control de la red Bitcoin— pueden ser más plausibles de lo que se pensaba.

Lovejoy subrayó la necesidad de una supervisión activa de la blockchain para identificar los ataques del 51% dirigidos a las blockchains de prueba de trabajo, declarando: "Es necesario que un observador activo esté vigilando la red para comprobar si se produce o no un ataque".

"Hasta ahora hemos dependido de que las víctimas nos digan si han sido atacadas. Como se puede imaginar, si esto da lugar a la insolvencia o a la pérdida de fondos de los usuarios, las víctimas no suelen estar muy interesadas en revelar cuándo se ha producido un ataque", añadió.

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