El Gobernador Adjunto del Banco de Japón (BOJ) habló negativamente sobre los efectos de las monedas digitales emitidas por el banco central (CBDC) en el sistema financiero actual en las palabras de clausura de una conferencia fintech, publicada ayer, 16 de abril.

En su alocución, el Gobernador Adjunto Masayoshi Amamiya declaró que, aunque el banco central emitió monedas digitales (CBDC), podría tener un impacto negativo en el sistema financiero actual, el banco está abierto en el futuro a la aplicación de tecnologías económicas emergentes como el cripto. La conferencia se celebró conjuntamente con el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Agencia de Servicios Financieros de Japón, y el Banco de Japón.

El Vicegobernador habló sobre los últimos retos para las autoridades financieras internacionales, es decir, la crisis financiera mundial en 2008, que fue un momento en el que las "cripto-monedas [sic] todavía no habían aparecido.” Con la llegada de esta nueva innovación, Amamiya observa que el CBDCs ahora está "estimulando la discusión global sobre en qué medida los bancos centrales deberían proporcionar sus infraestructuras de pago y liquidación a la sociedad.”

Amamiya ve la función de "dos niveles" actual de un banco central como ente que se comunica con otros bancos, quien entonces trata con el sector privado directamente, como "reflejan[do] la sabiduría de los seres humanos en la historia para lograr la eficiencia y la estabilidad del sistema de monedas.” Según este punto de vista:

“La emisión de monedas digitales del banco central para uso general podría ser análogo a permitir directamente que los hogares y las empresas tengan cuentas en el banco central. Esto puede tener un gran impacto en el mencionado sistema de moneda de dos niveles y la intermediación financiera de los bancos privados.”

Amamiya también menciona que las criptomonedas emitidas por el banco central podrían afectar la forma en que el banco central recoge la información de transacción para mantener la estabilidad de su sistema de pago:

“En suma, la innovación plantea muchas cuestiones fundamentales y los desafíos relacionados con el sistema monetario, el diseño de la infraestructura del banco central y la utilización de la información adjunta a las actividades económicas.”

Amamiya concluye que a pesar de que el Banco de Japón no estará emitiendo su propia moneda virtual ahora, el Banco entiende que la aplicación de nuevas tecnologías es siempre una posibilidad para la infraestructura del banco central.

El Banco de Japón y el Banco Central Europeo están trabajando en una iniciativa conjunta, el Proyecto Stella, investigando el uso potencial de Blockchain para la liquidación de valores.