Desde que comencé a escribir sobre el Bitcoin y sus elementos he repasado algunos de sus personajes, pero el personaje principal dentro de mis historias, para mi, ha sido Paco, el camarero del Bar desde donde siempre comienzo mis apuntes... ese que me escuchó desde el principio hablarle de la wallet, el que se maravilló con la bitcard, disimuló emoción con la minería, etc.

Pero hoy, cuando le fui a explicar como colocar una wallet en su bar y cobrar en Bitcoin, Paco me contó que estaba cansado del bar y que estaba buscando trabajo, claro que no encuentra “Ya no es como antes”.

 

Eso tiró por la borda todo lo que tenía pensado escribir. “Ya no es como antes”. Miro a Paco desde mi mesa con cierta pesadumbre y es que a veces, los que estamos inmersos en la “Era de la Comunicación” no somos realmente conscientes de a quienes dejamos en el camino.

 

Estamos inmersos en pleno cambio social; Guy Rocher Define el cambio social como una transformación observable en el tiempo, pero dicha transformación en este caso afecta a la estructura, y en la medida de ello modificaría el curso de la historia. Por otro lado González Seara dice que las estructuras no son estáticas, sino que están en continuo cambio. Las estructuras deben ser, por tanto vistas como un proceso. La idea de un orden social definitivo y perfecto (utopía conservadora) según González Seara , no tiene sentido.

 

Desde que apareció Internet el mundo no ha dejado de cambiar. Hay que destacar que el código de Internet TCP/IP fue lanzado de manera libre, es decir de libre modificación. Por ejemplo el World Wide Web, que es el programa de BROWSER que permite la navegación que hoy practicamos todos, lo creó Tim Berners-Lee, un británico, trabajando en sus horas libres, sin que se lo pidiera nadie, en el CERN de Ginebra. Por otro lado, el desarrollo de Internet sobre la base de redes libertarias comunitarias, que crearon toda clase de nuevas aplicaciones como las conferencias o los boletines o las listas de correo electrónico, no salieron del Departamento de Defensa, salieron de los grupos libertarios que se organizaron a través y en torno a las redes de Internet. Estos grupos eran desde el principio -es decir, desde 1978 y 1980.

 

Desde el correo electrónico, foros, redes sociales. El conocimiento ha dejado de ser controlado por unos pocos y todos somos creadores de contenidos. Incluso hoy, cuando quice saber que pensaba la gente sobre éste tema, pude preguntar directamente a líderes de opinión, sin intermediarios, en tiempo real... a gente que no he tenido en frente nunca, pero que me he tomado más de un café virtual, lo virtual, se hace, cada ves más real.

 

A éstas alturas estarás pensando ¿Y ësto qué tiene que ver con el Bitcoin? Todo.

 

El Bitcoin, al igual que Internet, se ha ido haciendo grande gracias a su descentralización, a la posibilidad de la participación de diferentes usuarios. Sí, Internet, nació a partir de Arpanet parte de un proyecto del departamento de inteligencia norteamericano; Pero yo hablo de Internet.

 

Sin embargo, no es el Bitcoin en si la verdadera revolución, es el Blockchain o Cadena de Bloques que nos abren diversos caminos y soluciones descentralizadas y libres. Hoy existen no solo el Bitcoin, también otras criptomonedas y muchos proyectos basados en una blockchain abierta (tiempo, arte, alquiler de Gpu, etc). Siempre tendiendo a la libertad de conocer, de movernos y de intercambiar bienes y servicios como y con quien nos de la gana, sin intermediarios y de opción libre, sin manchas de sangre de por medio.

 

Ahora bien, como diría Stan Lee (creador de Speader Man) “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”. ¿Qué poder es ese? El conocimiento o saber dónde encontrarlo, la conciencia de las nuevas herramientas que están provocando desde nuevos sistemas de producción a nuevas formas de crear dinero. Somos nosotros, sepamos menos o más, los que debemos incluir a los que nos rodean en este gran cambio...no por ser “frikis” si no por que objetivamente, el cambio de sistema se está dando.

 

Las señales son claras: inestabilidad económica a nivel mundial, aumento de extremos políticos, corrupción. Y la forma estructural y visceral en que el moribundo sistema se defiende, intentando adaptar leyes caducas a una educación del siglo XIX, intentando inventar leyes laborales precarias, cuando lo que realmente está pasando es que el sistema productivo está cambiando. Y para colmo, aquellos países donde la creación de Bitcoin es perseguido.

 

Puede que no sea en seis meses, ni en un año. Pero el crecimiento de demanda de criptomonedas en países con inestabilidad monetaria , la forma de comunicarnos y conocernos son valores que no podemos negarnos a ver.

 

Desde la barra de un bar de un pueblo perdido en las profundidades de Aragón donde el tiempo parece que se detuvo en 1980; Todo esto, no se ve y ahora me toca enfrentarme a mi responsabilidad y explicarle a Paco que tiene razón y “Ya las cosas no son como antes”.