La trazabilidad de datos en el sector energético con tecnología Blockchain está generando mucho ruido en el ecosistema por la relevancia que implica para la generación eficiente y responsable de energía y Chile parece tener el potencial para ser ejemplo en América Latina en este campo.

Si bien la trazabilidad de datos energéticos está avanzado en países europeos como España, con casos exitosos a nivel comercial que han obligado voltear la mirada hacia la cadena de bloques, aún falta una cultura que fomente compartir información y usar los datos abiertos para una mayor escalabilidad.

La Blockchain ha introducido una nueva posibilidad que ninguna tecnología antes lo permitía. La capacidad de gestionar una base de datos distribuida para una comunidad o red con la premisa de la seguridad apalancada en criptografía pura, supone un gran logro cuando de compartir información se refiere por las razones obvias de privacidad.

Gracias a la cadena de bloques es posible gestionar la información compartida en una plataforma única que permite abarcar a todos sus participantes, y que mantiene, en base a su tecnología, un estado cierto y consistente del sistema.

De acuerdo al estudio ”Blockchain: Un camino a la 4ta Revolución Industrial” realizado por el Ministerio de Economía en conjunto a la Comisión Nacional de Energía de Chile, el país andino se potencia como uno de los pioneros en la industria nacional en la adopción de la cadena de bloques, destacando logros como la gestión de redes flexibles y el comercio de energía a gran escala que permita concretar inclusive el comercio de electricidad con países vecinos.

Así el país andino se ubica con su Comisión Nacional de Energía como los primeros en el mundo del sector energético en implementar tecnología Blockchain en sus procesos de datos abiertos y otros productos exitosamente, lo que lo convierte ya en un referente a escala local de la región latinoamericana como los líderes en el ecosistema.

Su exitosa publicación de datos abierto la encontramos en el portal Energía Abierta, la primera plataforma del sector en latinoamérica que busca cumplir los objetivos del organismo regulador local de aumentar los niveles de seguridad, integridad y trazabilidad con la confianza de una información pública disponible e inmutable gracias a las bondades de la tecnología disruptiva.

Por si fuera poco, la Comisión Nacional de Energía de Chile permite a través de su plataforma tecnológica emitir certificados de confianza para realizar el seguimiento respectivo de los compromisos medioambientales adquiridos por la nación, entregando una mayor credibilidad y facilidad para la trazabilidad de los datos publicados en el portal.

Gracias a su 'notario digital', el CNE actualmente cuenta con 194 certificados de Blockchain emitidos, para un total de 12 temas de forma recurrente y otros 36 certificados que fueron emitidos por la publicación del Anuario CNE.

Por todas las razones expuestas anteriormente, Chile se perfile con un potencial impresionantes para ser ejemplo en trazabilidad de datos energéticos. Para ello debe resolver el gran reto de desarrollar, operar y actualizar una plataforma que genere confianza y trazabilidad a las inyecciones y retiros asociados a energía renovable, convirtiéndose en base de información para lograr certificación en distintos estándares internacionales.

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