Era digital. Era de la información. Era de Internet. Tantas veces hemos escuchado esos nombres sobre los tiempos en los que vivimos. Y en este escenario, mucho del dinero está gestionado electrónicamente a través de bancos y sistemas financieros. Sin embargo, esta transición hacia el dinero electrónico y su custodia en el sistema bancario presenta varias desventajas significativas. Entre ellas se encuentran la reserva fraccionaria y la falta de acceso a los depósitos.
Reserva Fraccionaria: ¿Qué es eso?
Uno de los problemas inherentes al sistema bancario tradicional es el concepto de reserva fraccionaria. Bajo este sistema, los bancos no están obligados a mantener el 100% de los depósitos en reserva. En lugar de eso, pueden prestar una parte significativa de los fondos depositados por los clientes, manteniendo solo una fracción en reserva. Este mecanismo puede generar problemas de liquidez, especialmente en tiempos de crisis económica.
Un ejemplo de las consecuencias de la reserva fraccionaria se vio claramente en el colapso financiero conocido como el "corralito" en Argentina en el año 2001. Aquellos tiempos produjeron heridas y cicatrices en los argentinos.
Durante aquella crisis, el gobierno argentino impuso restricciones severas a la disponibilidad de los depósitos bancarios, limitando el acceso a los fondos de los ciudadanos. Esta medida resultó en un caos financiero, mostrando cómo la reserva fraccionaria puede poner en riesgo el acceso a los ahorros personales en situaciones adversas.
Otra desventaja significativa del dinero electrónico es la falta de acceso en cualquier día u horario. Los bancos tienen horarios de operación limitados, y durante las horas no laborales, los clientes pueden tener problemas para acceder a sus fondos o realizar transacciones. A eso se suman problemas que tienen que ver con funcionamientos de cajeros electrónicos, problemas con homebanking, días feriados o paros, incluso hasta problemas con faltantes de billetes en papel.
Una mención aparte merece el sistema de transferencias que a veces está sujeto a vicisitudes que no son culpa de los usuarios. Y si hablamos de transferencias internacionales, se le suman altos costos y demoras importantes.
Además, durante emergencias o crisis, el sistema bancario puede llegar a imponer restricciones temporales a los retiros, como se observó durante el mencionado corralito en Argentina. Estas limitaciones pueden resultar problemáticas para los usuarios que necesitan acceso inmediato a su dinero.
¿Y las CBDC?
Una moneda digital de banco central, o CBDC (por sus siglas en inglés), no es muy diferente de una moneda tradicional emitida por un banco central. Se puede definir la CBDC como una versión digital de la moneda fiat.
Las llamadas CBDC son monedas digitales de Bancos Centrales. Básicamente es dinero de los estados pero en formato electrónico. Dinero programable. Con todo lo que ya sabemos de los sistemas que manejan bancos y gobiernos, ¿por qué pensar que serían una solución?
Si analizamos bien estas iniciativas, parecen significar más problemas para los usuarios, aunque más control por parte de gobiernos y empresas. Veamos algunos potenciales riesgos:
Más control del gobierno sobre la vida de los ciudadanos
Los entusiastas de la tecnología blockchain entenderán que una red controlada por el gobierno derrota el propósito inherente de la blockchain. Una CBDC ciertamente proporcionaría al gobierno más control sobre los fondos de los ciudadanos, ya que la naturaleza digitalizada de la CBDC permite una supervisión completa de las transacciones. Los ciudadanos que desean una menor implicación del gobierno en sus vidas financieras podrían ver un problema en las CBDC.
Falta de opciones
Los ciudadanos que dependan de un banco central podrían verse limitados. Al fin y al cabo, una CBDC podría eliminar la necesidad de bancos locales o regionales, poniendo todo el control en manos de un banco central. Los ciudadanos que deseen utilizar bancos tradicionales en lugar de un banco gubernamental podrían tener dificultades con el cambio.
Problemas potenciados
Con un gobierno en control de tanto a través de la CBDC, amenazas o errores dentro del sistema recaerían sobre el banco. Si los empleados introdujeran información incorrecta o se produjera algún fallo en el sistema, la reputación del banco central quedaría empañada.
Otra pregunta que surge. Con las historias de corrupción y falta de eficacia por partes de diferentes gobiernos en las últimas décadas (a manera de ejemplo podríamos recordar la crisis del 2008), ¿por qué deberíamos darles a los gobiernos más poder de control sobre las finanzas de los ciudadanos?
El dinero en efectivo tiene ventajas
A pesar del avance hacia el dinero electrónico y las criptomonedas, el dinero en efectivo sigue teniendo ventajas notables.
Primero, el dinero en efectivo ofrece un control directo sobre los fondos. Los usuarios pueden realizar transacciones y acceder a su dinero sin depender de sistemas electrónicos o bancarios, eliminando el riesgo de problemas técnicos o restricciones de acceso.
El efectivo tampoco está sujeto a las mismas limitaciones que el dinero electrónico, como los horarios bancarios. Los usuarios pueden utilizar efectivo en cualquier momento, sin necesidad de intermediarios. Además, en situaciones de emergencia o crisis, el dinero en efectivo sigue siendo accesible y útil cuando los sistemas electrónicos pueden fallar o estar inactivos.
Ventajas de Bitcoin con auto custodia
En contraste con los problemas asociados al dinero electrónico y al sistema bancario tradicional, Bitcoin ofrece varias ventajas significativas, especialmente cuando se mantiene en auto custodia. Al almacenar Bitcoin de forma segura en una billetera personal, los usuarios tienen control sobre sus fondos sin depender de intermediarios.
Una de las principales ventajas de tener Bitcoin en auto custodia es la autonomía. Los usuarios pueden acceder a sus fondos en cualquier momento, sin importar los horarios de los bancos o las restricciones impuestas por ellos. A diferencia del dinero electrónico, Bitcoin no está sujeto a las limitaciones de disponibilidad ni a las crisis financieras que afectan a las instituciones bancarias.
Además, Bitcoin no está sometido al sistema de reserva fraccionaria. Esto significa que, al mantener Bitcoin en auto custodia, los usuarios no corren el riesgo de que sus fondos sean prestados o utilizados de manera indebida por terceros. La naturaleza descentralizada de Bitcoin garantiza que los usuarios tengan control y propiedad de sus activos.
Sin embargo, si no tienes electricidad o internet, es muy difícil que puedas hacer transacciones con Bitcoin.
Uno podría preguntarse qué países tienen hoy en día problemas de suministro eléctrico o Internet. Te soprenderá la respuesta. Pero para dar tan sólo un par de ejemplos en la región latinoamericana, podrías mirar a Cuba o Venezuela.
Algunas conclusiones…
El dinero fiat en soporte electrónico y el sistema bancario tradicional presentan varias desventajas, incluyendo la reserva fraccionaria y la falta de acceso en ciertos momentos. Estas desventajas fueron evidentes durante el corralito en Argentina.
Por otro lado, Bitcoin con autocustodia ofrece ventajas significativas como autonomía y control sobre los fondos, sin los problemas del dinero fiat en soporte electrónico.
Asimismo, el dinero en efectivo continúa siendo una opción valiosa debido a su accesibilidad, privacidad e independencia de los sistemas electrónicos.
Al considerar las distintas formas de manejar el dinero, es esencial evaluar las ventajas y desventajas de cada una para tomar decisiones informadas sobre la gestión de los fondos.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.