Coincheck, una criptobolsa japonesa, ha comenzado a operar con una gama más amplia de activos el 26 de noviembre, confirmó un comunicado de prensa, diez meses después de que se robaran fondos por valor de más de 530 millones de dólares.

El Grupo Monex, el corredor de Internet que compró la central en marzo por unos $33.5 millones, hizo el anuncio después de meses de medidas correctivas y mejoras de seguridad.

El lanzamiento de Ripple y Factom (FCT) significa que Coincheck ahora está operando servicios para todas las "criptomonedas negociables" en la plataforma.

"Coincheck se ha reanudado constantemente a medida que se confirma la seguridad técnica de cada servicio mediante el apoyo de expertos externos", afirma el comunicado de prensa, y añade:

"A partir del anuncio de hoy sobre XRP y FCT, Coincheck ha reanudado los servicios de depósito y compra de todas las criptomonedas negociables en Coincheck."

Varios otros servicios, incluyendo transacciones apalancadas y un servicio de afiliados, entrarán en funcionamiento a su debido tiempo, agregó Monex.

Dos semanas antes, Coincheck había reanudado el comercio de NEM (XEM), la ficha que soportaba la mayor parte de sus pérdidas, mientras que a finales de octubre se restableció la funcionalidad.

La semana pasada, Zaif, otra plataforma japonesa que perdió alrededor de 60 millones de dólares en septiembre de este año debido a un hackeo, completó su entrega al nuevo propietario, Fisco, y las autoridades informaron que planeaban comenzar a compensar a los clientes antes de finales de noviembre.