Pedí hablar con un minero, éstos personajes que viven el Bitcoin en primera fila creando los bloques y validando las transacciones. Pensé que sería complicado, pero no. Claramente la comunidad funciona.

 

Cuando quedé con él creí que me encontraría con una persona seria y lejana, que se me presentaría lo que se llama “una entrevista hostil”, ya que me han dicho que los mineros son personas que cuidan mucho su intimidad y esquivan salir a la luz,  por lo que esperé con las preguntas preparadas. Para variar, estaba equivocada. Me encontré con Giovanni, un minero que vive actualmente a siete horas de diferencia con España y aceptó divertido este “café virtual”, dispuesto a explicar de manera abierta todo lo que ha ido aprendiendo, porque para él lo importante, es enseñar.

 

¿Qué le llevó a ser Minero? Así comencé a preguntar un poco tímida.

 

Para él todo comenzó con un juego que él mismo administraba. Cómo todos los juegos on line, se podían comprar distintos productos para ir adelantando en el mismo. Cobraba con diversas divisas, incluyendo pay pal. Alguien le habló del bitcoin, lo probó, vio que funcionaba y comenzó a cobrar en Bitcoin.

 

Saltar a ser minero fue prácticamente natural para él, emprendedor y ambicioso fue pidiendo consejos que fueron respondidos y así inició su aventura en Venezuela, con el compromiso de enseñar todo lo que iba aprendiendo a quién le apoyó en un principio Rafael Moraos, administrador de Bitcoin Venezuela.

 

La conversación iba siendo interrumpida constantemente por llamadas de mineros con algún problema o asuntos de su propio equipo. Por lo que las preguntas que tan concienzudamente había pensado y escrito, al garete. Así la charla fluyó entre risas y cafés que me preparaba en cada interrupción... ésta vez no podía escribir desde el bar de siempre, a las cinco de mañana no está abierto.

 

Giovanni comenzó a ser minero cuando el Bitcoin estaba a 100 dolares más o menos, ha visto fluctuaciones, pero nunca se ha rendido “Ser minero es trabajar para uno mismo, ganar tiempo y libertad”. Fue uno de los anfitriones de Felix Weis en su viaje por el mundo pagando con Bitcoin y fortaleció de ésta forma los lazos entre Bitcoiners de Venezuela.

 

Y de pronto me vi envuelta en la pasión de Giovanni por la minería convenciendome de iniciarme en la actividad. Mi primera resistencia es el consumo de electricidad, a lo cual me pidió datos del precio aquí en España y calculó el gasto que provocaría la instalación de un equipo en mi casa. Es bastante, pero compensa con el ingreso mensual de la máquina.

 

Rápidamente me explicó lo que es un “RIG” Tarjetas gráficas llamadas GPU, montadas para minar y el coste aproximadamente unos 1700 euros. Se ofreció a ayudarme en la configuración y lo que fuera. En realidad creó un grupo en Facebook “Soporte Bitcoin Venezuela” (46 miembros) donde proporciona todo tipo de ayuda y crea lo que para él es uno de los cimientos de la comunidad. Las Alianzas: Esto es apoyo mutuo entre diversas personas del mundo que conocen y están vinculadas al Bitcoin fuertemente.

 

Giovanni no oculta su entusiasmo por la libertad e independencia de las criptomonedas, le pregunté sobre el reconocimiento del Bitcoin en España como “Medio de Cambio”, no le gusta, cree que no hay que darle espacio a los gobiernos, porque buscan cualquier brecha para intentar invadir nuestro dinero virtual. Le expliqué, que creo, que puede servir para que las empresas y los comercios dudosos de cobrar en Bitcoin y así facilitar su uso.

 

Me expuso claramente sus argumentos. No nos tienen que importar las empresas, en lo que debemos priorizar es en acrecentar nuestra Comunidad, la Comunidad de las criptomonedas en general. Me explica que si la red de la comunidad es suficientemente grande, todo se puede conseguir a través de ella, por ejemplo en Venezuela se compran casas con Bitcoin, y da como ejemplo la comunidad de Bitcoin Venezuela y su actividad constante de intercambio. Según él, ese es el camino para castigar a la moneda fiduciaria.

 

Todo ésto mientras sigue convenciéndome de ser minera, me cuenta que no es necesaria tanta velocidad de Navegación, pero es importante la potencia de cálculo (lo que lo dan las tarjetas gráficas) medidas en BIT (Megahash, Gigahash, Terahash o Petahash). “Empieza con un RIG”, me insiste, verás como tener una máquina que produce tu propio dinero te da espacio para hacer otras cosas. Me cuenta que, ahora mismo está en México asesorando en un proyecto ambicioso de minería (del que seguiré indagando y escribiré los detalles en el siguiente artículo), y tiene muchos “mineros”(así llama a las máquinas), ya que se está formando una “Granja” y que éstos “mineros” siguen trabajando si tiene que salir de casa o mientras duerme. “Además”.- Continúa-. “Siempre tendrás apoyo” y se ofrece personalmente a enseñarme.

 

No sé si seré minera algún día, aun que estoy segura de que si lo intento, estaría totalmente respaldada y que cualquiera que lo intente lo estará, porque en algo estoy de acuerdo con éste minero, la Comunidad, las Alianzas o lazos de amistad, como me gusta llamarlo, es cada vez más fuerte e imponente. Ser independientes de lobbies, gobiernos y Bancos ¿No es ese en el fondo nuestra meta?

 

Toda esta conversación interrumpida por intercambio de canciones, risas, incluso le estuve leyendo algunos de mis Cuentos y Versos, por lo que seguro seguiremos charlando, además, tengo que saber más de su proyecto. Y ya para finalizar una frase de Giovanni para todos: “La ambición y la curiosidad lleva a aprender, si tienes ganas”. ¿Alguien se anima a ser minero?