En una publicación el domingo, el cofundador de Ethereum (ETH), Vitalik Buterin, expresó su apoyo a la utilización del fenómeno de las criptomonedas para servir a los intereses de los gobiernos locales y sus ciudadanos.

En concreto, Buterin habló de la formación de tokens de ciudad y organizaciones autónomas descentralizadas, conocidas como DAO. Las DAO son organizaciones autónomas en las que los usuarios redactan y hacen cumplir las normas por sí mismos, como la votación de las modificaciones de los protocolos en función de la cantidad de tokens subyacentes que poseen.

La idea aún está en pañales. No obstante, Buterin afirmó que los tokens de ciudad deberían satisfacer al menos tres de los cinco objetivos siguientes

  1. Actuar como fuentes de ingresos sostenibles para el gobierno.
  2. Facilitar la cooperación económica entre los residentes y la ciudad.
  3. Promover el ahorro y la creación de riqueza para todos los interesados.
  4. Fomentar las iniciativas sociales en toda la ciudad.
  5. Reducir la desigualdad de la riqueza.

En cuanto al último punto, Buterin propuso que la gran mayoría de los tokens de ciudad recién emitidos se destinen a los residentes como una forma de renta básica universal. El cofundador de Ethereum criticó los mecanismos económicos actuales por favorecer "a los ricos en detrimento de los pobres"-

El proyecto de criptomoneda más destacado que se describe en la entrada del blog es CityCoins, que se basa en la cadena de bloques Stacks (STX). Stacks es una solución de capa uno que permite los contratos inteligentes en la red Bitcoin (BTC). El protocolo asigna el 30% de los ingresos de la minería de BTC enviados a los poseedores de STX a un monedero reservado para cada ciudad.

Los usos teóricos incluyen descuentos y beneficios proporcionados por los negocios locales a los poseedores de CityCoin. El grupo ya ha lanzado un tipo de token de ciudad, MiamiCoin. El alcalde de Miami, Francis Suárez, la ha apoyado públicamente, afirmando que podría "revolucionar la forma en que se financian los gobiernos".

Aparte de los efectos socioeconómicos, Buterin también alabó el potencial de los tokens de ciudad para mejorar la gobernanza existente:

"La democracia digital del siglo XXI, a través de la votación cuadrática y la financiación en línea en tiempo real, podría hacer un trabajo mucho mejor que la democracia del siglo XX, que en la práctica parece haberse caracterizado en gran medida por la rigidez de los códigos de construcción y la obstrucción en las audiencias de planificación y permisos. Y, por supuesto, si vas a utilizar blockchains para asegurar la votación, empezar haciéndolo con nuevos y extravagantes tipos de votos parece mucho más seguro y políticamente factible que reajustar los sistemas de votación existentes".

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