Resumen de la noticia
La IA y la blockchain crean una nueva forma de medir el rendimiento y la confianza.
Las stablecoins entran en fase de regulación y competencia global.
Las tesorerías digitales integran las criptomonedas al balance de grandes empresas.
El mercado de criptomonedas entró en una nueva fase de madurez. Y, según Rony Szuster, Head de Research del Mercado Bitcoin, quien participó en la conferencia Token2049 en Singapur: tres tendencias definirán el futuro del sector en los próximos años: inteligencia artificial integrada en tokens, stablecoins reguladas y tesorerías digitales corporativas. Estos frentes, cada uno con su papel, están moldeando el rumbo de una industria que se vuelve cada vez más estratégica para la economía global.
En los últimos días, más de 25.000 personas se reunieron en el evento, considerado el más importante del calendario cripto internacional. Allí, los principales líderes, inversores y desarrolladores discutieron las próximas fronteras tecnológicas que prometen redefinir la forma en que las empresas y los gobiernos manejan los criptoactivos. Las conversaciones mostraron que el foco del sector está menos en promesas y más en soluciones reales y sostenibles.
Szuster destaca que, entre los temas más comentados, la convergencia entre la inteligencia artificial y la blockchain se destacó. El movimiento, que ya mueve miles de millones de dólares, va mucho más allá de la especulación. Muestra que los criptoactivos están comenzando a funcionar como instrumentos de gobernanza y reputación para medir la eficiencia de los propios modelos de IA. En nuevos proyectos presentados en la conferencia, los usuarios pueden probar sistemas de IA, evaluar resultados y asignar calificaciones, creando rankings descentralizados de rendimiento.
Este nuevo formato de evaluación representa una ruptura necesaria. Los benchmarks tradicionales de IA están obsoletos, ya que no reflejan el uso práctico de los modelos en entornos reales. Al traer la blockchain al centro de este proceso, el sector gana transparencia, incentivo y validación pública, tres pilares que pueden cambiar completamente la forma en que la inteligencia artificial es medida y remunerada.
Actualmente, existen alrededor de 1.000 tokens ligados a la IA, con un valor de mercado combinado superior a 30.000 millones de dólares. Sin embargo, Rony advierte: el espacio para proyectos experimentales y de puro hype está encogiéndose.
Solo sobrevivirán los tokens que presenten utilidad concreta, impacto mensurable y capacidad de resolver problemas reales. La próxima fase, dicen, es de consolidación; y en ella, el capital se concentrará en los proyectos que realmente entreguen valor.
Stablecoins
Mientras tanto, el mercado de stablecoins también vive un momento de profunda transformación. Incluso ya ampliamente adoptadas en todo el mundo, las monedas digitales pareadas al dólar pasan por una nueva fase de competencia y regulación. Tether, emisora de la mayor stablecoin del mundo, anunció durante la conferencia el lanzamiento de la USAT, un activo que busca adecuarse a las nuevas exigencias del GENIUS Act, legislación creada para estandarizar y acelerar la adopción de stablecoins en los Estados Unidos.
La meta es audaz: hacer de la USAT un activo de 1 billón de dólares en valor de mercado en hasta tres años. El objetivo refleja la confianza de la empresa en el crecimiento de la demanda por instrumentos financieros digitales estables, especialmente en medio de la incertidumbre económica global. El movimiento también marca una disputa directa por el protagonismo regulado del sector, ahora que la frontera entre cripto y el sistema bancario tradicional comienza a desaparecer.
El lanzamiento de la USAT ganó aún más relevancia tras la contratación de Bo Hines, exasesor del gobierno Trump, para liderar el proyecto. Su presencia simboliza el fortalecimiento de los puentes entre Washington y el mercado cripto. En entrevista durante el evento, Hines afirmó que las barreras entre los dos mundos "simplemente dejaron de existir". Para él, el fin de la llamada Operación Chokepoint 2.0, que durante años dificultó el acceso de empresas de cripto a bancos, abrió un nuevo ciclo de integración institucional.
Pero el avance no se limita a las monedas estables. Un tercer movimiento llamó la atención en Token2049: el crecimiento de las Digital Asset Treasuries (DATs), o tesorerías digitales corporativas. Estas compañías surgieron con la propuesta de incorporar criptoactivos directamente en las reservas financieras de empresas públicas, creando un puente entre la blockchain y el mercado tradicional. En la práctica, estas tesorerías funcionan como una nueva clase de inversión, en la que las acciones de las empresas reflejan la exposición (a veces incluso apalancada) a criptoactivos.
De acuerdo con Rony, este modelo se ha extendido rápidamente, principalmente en los Estados Unidos, pero comienza a ganar fuerza en otras regiones. Los analistas señalan que 2025 marcó el avance de las llamadas “altcoin-first treasuries”, tesorerías que prefieren tokens alternativos en lugar de Bitcoin. La tendencia muestra una diversificación creciente y señala que el mercado se está volviendo más sofisticado y menos dependiente de un único activo dominante.
Actualmente, las DATs ya acumulan más de 200.000 millones de dólares en criptoactivos, un número que crece mes a mes. El fenómeno refleja la búsqueda de grandes corporaciones por estrategias financieras descentralizadas y por exposición a criptoactivos que no dependen de bancos centrales. Además, refuerza la percepción de que la blockchain dejó de ser una tecnología experimental para convertirse en parte del balance de las empresas.
“Estamos viendo un cambio estructural. La criptoeconomía está entrando en su fase adulta. Lo que antes era un experimento, ahora es infraestructura”, finaliza el ejecutivo del MB.
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