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Gustavo GodoyGustavo Godoy

Banco de España: Riesgo de "enfriamiento" económico

Banco de España alerta: aranceles de EEUU enfrían economía global y española.

Banco de España: Riesgo de "enfriamiento" económico
Opinión

El Banco de España acaba de soltar una advertencia que no podemos ignorar. Lo que nos viene para el resto de 2025 podría ser turbulencias, muy distinto al 2024 que, en retrospectiva, parece haber sido una balsa de aceite. El principal culpable de esta posible tormenta, según el supervisor bancario español, son las medidas arancelarias que llegan desde Estados Unidos. Si no hay un acuerdo a la vista, prepárense para un "enfriamiento económico" que nos afectará a todos, a nivel global y, por supuesto, también en España.

El tema no es menor. El Banco de España, en su informe anual de economía de 2024, nos da las cifras para entender la magnitud del problema. Hace apenas un par de años, en 2023, el arancel promedio que las exportaciones españolas a EEUU soportaban era de un 3%. Una cifra manejable, dirían algunos.

Pero el panorama ha cambiado, y los "últimos giros" de la política comercial estadounidense ya han hecho que ese arancel se dispare hasta un 12%. ¡Casi el cuádruple en un abrir y cerrar de ojos! Y la cosa podría empeorar aún más. Si Washington decide apretar el botón de los "aranceles recíprocos" que anunció a principios de abril, ese arancel efectivo medio para España escalaría hasta un alarmante 18%. Esto es un golpe directo a la línea de flotación de nuestras empresas exportadoras. El director general de Economía del BdE, Ángel Gavilán, no se anda con rodeos y estima que el impacto de esta guerra arancelaria podría rondar el 1% del PIB español para este mismo año.

Ahora, pensemos en el impacto económico. El Banco de España nos dice que la exposición directa de las exportaciones españolas a Estados Unidos, en términos de volumen, es "relativamente poco significativa". Pero aquí viene el truco: el impacto indirecto sí será "significativo". ¿Por qué? Porque nuestra economía está entrelazada con la global. Muchos productos españoles, pensemos en químicos o metales, se exportan a terceros países que, a su vez, los envían a EEUU. Es una cadena de montaje global, y si un eslabón se rompe por los aranceles, el efecto dominó nos alcanza.

Además, no solo hablamos de bienes. El sector servicios, tan vital para España, también sentirá el golpe. De forma indirecta, a través de las manufacturas que dependen de al menos un 20% de servicios. Y de forma directa, en áreas como el turismo y, ojo, en los tipos de cambio. Si el euro se fortalece frente al dólar debido a esta incertidumbre, nuestras exportaciones pierden competitividad, y eso, amigos, es un dolor de cabeza para cualquier economía.

El BdE ha hecho sus deberes y ha simulado hasta cuatro escenarios comerciales. La conclusión es contundente: el aumento de los aranceles siempre ejerce una presión negativa sobre la actividad económica global. Y, por supuesto, el golpe es más duro si los países afectados por los aranceles de EEUU deciden responder con represalias.

Curiosamente, el impacto negativo sería más fuerte en Estados Unidos, con mayores presiones inflacionistas, que en la zona euro o en España. Aquí, los efectos serían más moderados, e incluso podrían compensarse con una menor actividad general y un "efecto de desviación de comercio". Esto significa que algunos productos que antes iban a EEUU ahora podrían terminar en Europa. Una pequeña ventana, quizás, pero no una solución mágica.

Pero no todo es arancel. El Banco de España señala otras fuentes de incertidumbre que complican el panorama. El dólar sigue siendo la moneda de reserva global por excelencia y un activo refugio clave. Si la confianza en la economía estadounidense flaquea, eso genera ondas de choque en todo el sistema financiero.

Las valoraciones elevadas en algunos mercados financieros también son un punto de vulnerabilidad. Y lo más preocupante, la pérdida de confianza de los inversores internacionales en la economía estadounidense amplifica todos estos riesgos. En resumen, la volatilidad ya no es una excepción, sino un rasgo estructural de los mercados financieros.

A diferencia de crisis pasadas, la incertidumbre actual es "difusa y persistente". Es como una niebla espesa que no nos permite ver claramente qué escenarios son más probables. Además, los indicadores económicos tradicionales no están captando estas turbulencias de forma inmediata, lo que dificulta saber dónde estamos parados en el ciclo económico y qué esperar.

En otras palabras, el Banco de España nos pone en alerta. Los aranceles de EEUU ya están aquí y, sin un acuerdo, se intensificarán, provocando un "enfriamiento económico" global. El impacto directo en España puede ser "relativo", pero las consecuencias indirectas, la inestabilidad global y la incertidumbre en los mercados financieros serán "significativas". Es un llamado a la cautela y, sobre todo, a la preparación. Porque en este tablero de ajedrez global, cada movimiento cuenta.

Sin embargo, en este complejo ajedrez económico, hay matices importantes. Aunque la advertencia del Banco de España es seria, la flexibilidad y capacidad de adaptación de las economías también entran en juego. Las empresas, por ejemplo, pueden buscar diversificar sus mercados de exportación, desviando sus productos hacia otras regiones menos afectadas por los aranceles. También pueden ajustar sus márgenes o innovar para reducir costos y absorber parte del impacto. La misma "desviación de comercio" que el BdE menciona para Europa, podría, en cierta medida, amortiguar el golpe para algunos sectores.

No obstante, el riesgo no es para tomárselo a la ligera. La economía global es un sistema interconectado, y la incertidumbre, como un virus, puede propagarse rápidamente. Lo que el Banco de España nos recuerda es la importancia de la preparación y la vigilancia constante en un entorno que cambia a velocidades de vértigo. Al final, la capacidad de respuesta de España y del resto de Europa ante este escenario incierto será clave para determinar la magnitud del "enfriamiento" económico.

En este panorama volátil, queda claro que las advertencias del Banco de España no son para ignorarlas. La interconexión global significa que ninguna economía es una isla. Si bien la amenaza de los aranceles estadounidenses y la incertidumbre general pintan un escenario complejo, la capacidad de adaptación y la diversificación serán defensas cruciales. La vigilancia constante y una preparación proactiva son la clave para navegar este "enfriamiento" económico que se vislumbra en el horizonte, esperando que la flexibilidad mitigue los golpes más duros.

Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.