Bitzero ha asegurado 25 millones de dólares en financiación para expandir sus operaciones comerciales, mientras el minero de Bitcoin y operador de centros de datos continúa su cambio estratégico hacia la computación de alto rendimiento (HPC) y alto margen, al tiempo que enfatiza la sostenibilidad ambiental.
Los fondos se utilizarán para adquirir 2.900 mineros Bitmain S21 Pro, con un despliegue programado para los próximos cuatro a seis meses. Se proyecta que esta expansión generará 10 millones de dólares adicionales en ingresos.
Con sede en Vancouver, Canadá, Bitzero opera centros de datos en América del Norte y Europa. La compañía cuenta entre sus patrocinadores con el inversor y personalidad de Shark Tank Kevin O’Leary.
Bitzero comenzó a buscar iniciativas de minería de cero emisiones de carbono ya en 2022, lanzando sus esfuerzos en Noruega a través de una asociación con un gobierno local. Desde entonces, la compañía ha expandido constantemente su presencia en el espacio de la HPC.
Bitzero no está sola en esta transición. A principios de esta semana, Bitfarms anunció planes para entrar en los mercados de HPC y centros de datos, aprovechando su cartera de energía de Pensilvania como un activo estratégico. Como parte de la medida, la compañía cambió su marca para reflejar un enfoque más amplio en IA y HPC, junto con sus operaciones principales de minería de Bitcoin (BTC).
Hive Digital Technologies se encontraba entre los primeros en adoptar el cambio hacia los centros de datos de HPC e IA, iniciando su giro en 2022. La compañía comenzó a reportar ingresos relacionados con la HPC en su estado de resultados al año siguiente.
El segmento de HPC de Hive actualmente opera a una tasa de ejecución anual de 20 millones de dólares, con proyecciones que apuntan a 100 millones de dólares para 2026.
Mineros de Bitcoin responden a las presiones del mercado
La rentabilidad en la minería de Bitcoin ha estado bajo una presión creciente con cada halving sucesivo. Si bien los puntos de equilibrio varían según la operación, Fidelity Digital Assets señala que el éxito de un minero a menudo depende de su capacidad para soportar períodos de pérdidas mientras espera que el precio de Bitcoin se recupere.
Una combinación de recompensas de bloque decrecientes, el aumento de los costos de electricidad y las crecientes demandas de mantenimiento ha empujado a varios mineros a diversificarse en otras cargas de trabajo que requieren mucha energía.
El rápido crecimiento en la demanda de IA ha proporcionado una oportunidad ideal, permitiendo a estas compañías reutilizar o actualizar su infraestructura —particularmente GPUs— para soportar el entrenamiento de IA y la computación de alto rendimiento.
Además de diversificarse en nuevas cargas de trabajo, varios mineros han adoptado una estrategia "Hodl", manteniendo su Bitcoin minado en anticipación a una futura apreciación del precio.
Ese enfoque ha dado sus frutos en 2024 y 2025, ya que Bitcoin ha roto repetidamente máximos históricos, superando más recientemente los 123.000 dólares.
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