En un esfuerzo por eludir los desafíos regulatorios que enfrentan muchos exchanges centralizados y servicios de pago, Diamond Standard Co. ha introducido un sistema de pago alternativo basado en blockchain llamado CARATS.
CARATS se desvía de los exchanges centralizados tradicionales y servicios de pago al utilizar diamantes tokenizados, respaldados por productos básicos del mundo real, para facilitar pagos, remesas y transferencias de riqueza entre usuarios.
Las personas pueden comprar cantidades completas o parciales de estos diamantes tokenizados, comerciarlos, transferirlos, convertirlos a monedas fiduciarias locales, o optar por intercambiar el token para recibir la entrega de los diamantes físicos.
Diamond Standard Co. logra esto al acuñar monedas y barras físicas, incrustadas con diamantes reales, y un chip integrado que puede auditar los diamantes y transmitir la versión tokenizada del activo en la blockchain.
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Los usuarios pueden enviar estos CARATS a través de SMS o utilizando plataformas de redes sociales, proporcionando una forma para que las personas no bancarizadas envíen pagos electrónicos.
Debido a que el sistema CARATS no es en realidad una criptomoneda, sino una forma de transferir recibos por un producto físico, la plataforma está protegida de los obstáculos regulatorios normales que rodean a los servicios de transmisión de dinero.
Esto permite que CARATS funcione como un centro de pagos sin la molestia de tener que conseguir una licencia de transmisor de dinero en cada jurisdicción donde el servicio está activo.
Elon Musk y su plataforma de redes sociales X enfrentan estos mismos desafíos regulatorios en su intento de convertirse en una red social con un sistema de pagos integrado.
En 2023, X pudo conseguir licencias de transmisor de dinero en los estados de Misuri, Míchigan, Arizona, Georgia, Maryland, New Hampshire, Pensilvania, Dakota del Sur, Kansas, Wyoming y Rhode Island.
Sin embargo, la plataforma está obligada a obtener una licencia de transmisor de dinero en cada uno de los 50 estados de EE.UU., así como una para cada país donde el servicio de transmisión de dinero de la plataforma de redes sociales esté activo.
Esto significa que se deben emitir cientos de licencias individuales antes de que X pueda convertirse en un servicio viable de transmisión de dinero. El CEO de Diamond Standard, Cormac Kinney, señaló:
“Muchos transmisores de dinero están atrapados en el pasado, descuidando todas las herramientas disponibles o atados por los obstáculos legales y regulatorios de los pagos y transferencias de dinero.”
Explicó que “Esto es un problema difícil de resolver incluso para los innovadores de pagos con visión de futuro como Elon Musk, cuya plataforma X no puede operar como transmisor de dinero en 34 estados de EE. UU. y 200 otras jurisdicciones globales.”
De manera similar, los exchanges de criptomonedas centralizados enfrentan el mismo problema de tener que conseguir licencias de transmisor de dinero y otros permisos para operar en cada jurisdicción en la que una plataforma particular ofrece sus servicios.
A pesar de estas estrictas regulaciones, varios exchanges de criptomonedas centralizados que poseen licencias de transmisor de dinero aún participaron en prácticas cuestionables que llevaron a su desaparición y a la pérdida de los activos de los clientes, siendo FTX el caso más notable en 2022.
La obtención de estos permisos regulatorios a menudo es prolongada y agotadora. IBTCEX, Huobi HK, QuanXLab y otros cuatro exchanges retiraron recientemente sus solicitudes de permisos operativos en el mercado de Hong Kong.
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