El exchange de criptomonedas en quiebra FTX llegó a un acuerdo provisional con su mayor acreedor, el Servicio de Impuestos Internos (IRS) de Estados Unidos.
De acuerdo con una presentación del 3 de junio, el exchange y el IRS acordaron resolver una disputa fiscal de USD 24,000 millones. En un principio, el IRS reclamaba a FTX más de USD 44,000 millones en impuestos, pero la cantidad se redujo posteriormente. El acuerdo depende de que el tribunal apruebe el plan de reorganización de FTX.
Según el acuerdo, el IRS aceptaría resolver su reclamación de USD 24,000 millones, recibiendo USD 200 millones en concepto de reclamación fiscal prioritaria pagados en un plazo de 60 días a partir de la aprobación del plan. La autoridad fiscal también cobrará USD 685 millones como reclamación subordinada, que se paga después de los clientes y otros acreedores.
El acuerdo cubre todas las reclamaciones fiscales hasta el 31 de octubre de 2022. Según FTX, el acuerdo reduce el riesgo de litigio y aumenta la certidumbre en cuanto a la recuperación de acreedores y clientes. «El resultado de estos procedimientos sería incierto dadas ciertas cuestiones novedosas y complejas de derecho fiscal planteadas por las reclamaciones del IRS».
El expediente muestra que FTX no niega que deba impuestos, pero discrepa de la cuantía y los motivos concretos de la deuda tributaria. En concreto, el exchange argumenta que no debería tributar por los fondos malversados por su antiguo CEO, Sam Bankman-Fried. Tampoco está de acuerdo con los cálculos del IRS para los impuestos sobre el empleo relacionados con los salarios pagados a Bankman-Fried y otros ejecutivos.
Además, el exchange sostiene que tiene deducciones y pérdidas válidas que el IRS está rechazando erróneamente por falta de documentación adecuada. Sin embargo, la autoridad fiscal no está de acuerdo y está dispuesta a enfrentarse a FTX en los tribunales por un importante pago de impuestos:
"El IRS no está de acuerdo con los argumentos de los deudores y les ha informado que, en ausencia de un acuerdo, seguiría estas y otras teorías para imponer una responsabilidad tributaria significativa".
El 8 de mayo, FTX propuso un nuevo plan para reembolsar a los acreedores, con el objetivo de reembolsar íntegramente todos los créditos más algunas compensaciones adicionales. Sólo los acreedores que tengan créditos por un importe inferior a USD 50,000 podrán optar a una recuperación del 118%, lo que FTX anticipó que era «el 98% de los acreedores de FTX por número». Los reembolsos se basarán en el valor de los activos en el momento de la quiebra de FTX, en noviembre de 2022.
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