Los inversores institucionales compraron durante la caída a raíz del último FUD de China, y los productos de inversión en activos digitales generaron entradas por un valor de USD 95 millones la semana pasada.

Según el informe semanal “Digital Asset Fund Flows Weekly” de CoinShares del 27 de septiembre, el aumento de las compras durante la caída ayudó a impulsar una sexta semana consecutiva de entradas en los productos de inversión institucional en criptomonedas.

Los USD 95 millones de entradas entre el 20 y el 24 de septiembre marcan un aumento semanal de entradas del 126%. Los productos de inversión en BTC y Ether lideraron el grupo, con USD 50.2 millones y USD 28.9 millones de entradas, respectivamente.

Si bien los productos de inversión en BTC han registrado salidas en 13 de las últimas 17 semanas, el sentimiento positivo hacia el activo aumentó durante septiembre, ya que se registraron entradas en las últimas tres semanas. Las entradas en los productos de Bitcoin también aumentaron un 234% de una semana a otra.

El apetito institucional por las altcoins parece seguir siendo fuerte, ya que los productos que siguen a Solana (SOL), Cardano (ADA) y Polkadot (DOT) registraron entradas de USD 3, USD 9, USD 2.6 y USD 2.4 millones respectivamente. Los fondos multiactivos también registraron entradas de USD 6.4 millones la semana pasada.

El gran muro del FUD

El 24 de septiembre, el Banco Popular de China (PBoC, por sus siglas en inglés) publicó un memorando en el que anunciaba la prohibición de todas las transacciones de criptomonedas, lo que desencadenó una caída del 8% en el precio de Bitcoin (BTC) junto con un retroceso en general en todo el mercado de criptomonedas.

Las medidas actualizadas del PBOC -que se publicaron inicialmente el 3 de septiembre antes de que fueran recogidas por los medios de comunicación occidentales la semana pasada- indicaban que las instituciones financieras y las empresas de pago tenían prohibido prestar cualquier servicio relacionado con las transacciones de criptomonedas.

Aunque el FUD ocasionado por los reguladores chinos ha afectado históricamente a los mercados de criptomonedas, también ha servido como catalizador para el aumento de los precios o las carreras alcistas en los meses posteriores a los anuncios.

En septiembre de 2017, el gobierno chino prohibió que los exchanges de criptomonedas ofrecieran servicios a los usuarios del país, y también les prohibió a los ciudadanos participar en ofertas iniciales de monedas. Tras la doble prohibición, el precio de BTC experimentó un ascenso histórico desde el rango de los USD 4,000 hasta un precio máximo histórico de unos USD 20,000.

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