El guardián financiero del Japón, la Agencia de Servicios Financieros (FSA), ha establecido aún más condiciones regulatorias para los intercambios nacionales de criptos, informa Cointelegraph Japón hoy, 6 de mayo.

Al parecer, el ente regulador está intensificando sus esfuerzos para evitar la repetición de pirateos como el del intercambio de criptos Coincheck por $532 millones en enero, el mayor pirateo sufrido por un intercambio en la historia del criptoecosistema.

Como Cointelegraph Japón informa, una fuente FSA le dijo al noticiero local Nikkei Asian Review que identificar riesgos potenciales de antemano ha sido un reto para el guardián. La fuente presuntamente dijo a Nikkei que “sin el conocimiento necesario, hemos estado sintiendo nuestro camino a través de la oscuridad sobre cómo deberíamos revisar detenidamente todos estos diferentes aspectos.”

El nuevo marco supone que las medidas de protección del inversor y los intentos volver a revisar los sistemas internos de gestión de los intercambios.

Según Nikkei, a los intercambios ahora se les requerirá supervisar las cuentas del cliente varias veces a diario, en busca de fluctuaciones sospechosas, gestionar los activos del cliente por separado de esos en el intercambio, y almacenar cripto tenencias solo en sistemas sin conexión. También enfrentarán medidas más estrictas contra el lavado de dinero (AML) que exigen comprobaciones conoce a tu cliente (Know You Client, o KYC), como la verificación de la identificación y la protección de múltiples contraseñas para transferencias grandes.

Las medidas especialmente confirman también que los intercambios públicos registrados ahora enfrentan severas restricciones -efectivamente una prohibición- sobre el comercio orientado al anonimato de altcoins, tales como el Dash (DASH) y Monero (XMR).

La FSA enviará inspectores tanto a los operadores nuevos y existentes para verificar el cumplimiento de las nuevas medidas, dice Nikkei en otros informes.

Un nuevo organismo de autocontrol para intercambios japoneses fue organizado el mes pasado para proporcionar asistencia a los operadores nacionales, algunos de los cuales han cedido bajo la creciente presión de la FSA, cuyas medidas han incluido inspecciones relámpago in situ, suspensiones temporales, y sanciones. En abril, el intercambio internacional de criptos, Kraken, anunció la finalización de sus servicios en Japón, citando los crecientes costos de los negocios.