A Sam Bankman-Fried, cofundador de FTX, se le ha denegado su solicitud de obtener documentos de un bufete de abogados de Silicon Valley, Fenwick & West LLP, como parte de su estrategia de defensa en su caso de fraude federal en curso, informó Bloomberg. Bankman-Fried esperaba utilizar estos documentos para respaldar su alegación de que se basó en asesoramiento jurídico para llevar a cabo las actividades por las que está siendo procesado.

Recientemente, el equipo jurídico de Bankman-Fried se dirigió al juez que supervisa el caso, instando a la fiscalía a entregar los documentos obtenidos de Fenwick & West o a permitir que se obtuvieran directamente mediante una citación. Sin embargo, el juez de distrito Lewis Kaplan desestimó la petición, calificándola de "intento de pesca" que no estaría justificado.

Para preparar su defensa, el equipo jurídico de Bankman-Fried había planeado argumentar que había confiado en el asesoramiento proporcionado por el bufete de abogados Fenwick & West. Bloomberg señaló que los acusados de delitos penales suelen emplear esta estrategia para contrarrestar las alegaciones de los fiscales de infracción intencionada de la ley.

Al parecer, los abogados de Fenwick & West trataron diversos temas, como el uso de aplicaciones de mensajería encriptadas, los préstamos multimillonarios a ejecutivos de FTX y el cumplimiento de la normativa bancaria de Estados Unidos, que, según los abogados de Bankman-Fried, son parte integrante de los cargos imputados a su cliente.

Bankman-Fried, que se enfrenta a dos juicios penales, ha sido acusado de orquestar un complejo esquema de fraude que supuso la apropiación indebida de miles de millones de dólares en fondos de clientes de FTX. Los fondos se utilizaron supuestamente para inversiones de alto riesgo, gastos personales e incluso donaciones políticas.

El 22 de junio, FTX presentó una demanda ante el Tribunal de Quiebras del Distrito de Delaware, con el objetivo de recuperar más de USD 700 millones de varias empresas de inversión vinculadas al exchange. La demanda se dirige contra K5 Global, Mount Olympus Capital y SGN Albany Capital, junto con sus entidades afiliadas y los copropietarios de K5; Michael Kives y Bryan Baum. FTX alega que se transfirieron fondos de su empresa afiliada, Alameda Research, a estas entidades a través de empresas fantasma, y pretende reclamar los fondos como transacciones evitables.

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