Neuralink, la startup de interfaz cerebro-ordenador (BCI, por sus siglas en inglés) de Elon Musk, ha iniciado su segundo ensayo en humanos. La noticia se conoció durante un episodio del podcast Lex Fridman, en el que Musk reveló sin miramientos que el segundo ensayo en humanos había sido un éxito, "de momento todo va bien". 

Musk continuó diciendo que el segundo implante estaba funcionando correctamente con cerca de 400 electrodos "proporcionando señales".

Interfaz cerebro-ordenador de Neuralink

Las interfaces cerebro-ordenador son dispositivos electrónicos que permiten a los humanos comunicarse con los ordenadores utilizando sus pensamientos. Aunque puedan sonar a ciencia ficción, las BCI existen desde hace décadas.

Su principio es sencillo: la actividad cerebral produce una señal eléctrica que una máquina puede medir. Igual que una radio FM puede sintonizarse para interpretar señales FM específicas como emisiones distintas, un ordenador puede interpretar distintas señales eléctricas como órdenes distintas.

Una BCI no es más que el dispositivo que mide y transmite las señales. Algunos se llevan externamente y otros, como el de Neuralink, se implantan quirúrgicamente.

El primer paciente de Neuralink, Noland Arbaugh, ha dado numerosos testimonios afirmando que el dispositivo le cambió la vida. Arbaugh quedó paralítico en un accidente de buceo y perdió el uso de sus extremidades. Desde su implante experimental, es capaz de controlar interfaces informáticas como punteros de ratón para jugar a videojuegos, enviar mensajes de texto y navegar por Internet utilizando sólo sus pensamientos.

¿Superpoderes?

Musk también le dijo a Fridman que, más allá de permitir a los humanos manejar interfaces informáticas sencillas con sus pensamientos, Neuralink les daría capacidades excepcionales.

"Demos superpoderes a la gente", bromeó el multimillonario.

Según Musk, Neuralink permitirá dar a los humanos visión térmica, visión de águila e incluso restaurar la ceguera. También dijo que podría curar varias enfermedades y sanar algunos trastornos neurológicos.

Musk también opinó que la gente encontraría la interacción tradicional con humanos y ordenadores "agonizantemente lenta" después de usar el implante para comunicarse "más rápido de lo que cualquier humano puede comunicarse tecleando o hablando".

Aunque la idea general parece ser que más rápido es mejor, la sociología básica parece discrepar.

Los elefantes, por ejemplo, supuestamente utilizan unos 70 sonidos de trompeta diferentes y alrededor de 140 señales visuales y táctiles, expresiones y gestos. Comparado con los humanos, es una eficacia increíble. Una persona media conoce unos 27,000 lemas (derivaciones de palabras) e innumerables señales no verbales.

Los elefantes son más eficientes, pero no escriben literatura ni artículos científicos.

Además, la comunicación humana es mucho más que palabras e imágenes. Las investigaciones demuestran que, por término medio, nuestros cerebros procesan el lenguaje y las expresiones corporales más rápido que la comunicación escrita o verbal. En definitiva, los humanos no podemos comunicarnos más rápido que la velocidad del pensamiento.

Sin embargo, Musk también sugirió durante el podcast que, en el futuro, los humanos podrán de algún modo fusionarse con sistemas de IA utilizando Neuralink para ampliar las capacidades de su cerebro. No hemos podido encontrar ninguna investigación científica que respalde esta idea.

Un documento publicado en 2019 plantea la hipótesis de una tecnología del futuro lejano llamada "neuralnanorobótica" que teóricamente podría ser capaz de monitorizar directamente las "86 × 10^9 neuronas y  aproximadamente 2 × 10^14 sinapsis" del cerebro. Pero la línea de tiempo para tal tecnología podría estar a décadas o incluso siglos de distancia.

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