Un grupo de empresas locales le ha pedido a la gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, que deniegue los permisos para convertir las viejas centrales eléctricas de combustibles fósiles de la ciudad en centros de criptominería. La petición llega en forma de una carta firmada por varias organizaciones, empresas y grupos laborales.

La carta pide una evaluación ambiental para la minería de criptomonedas Proof-of-Work en el Estado de Nueva York, al tiempo que insta a la gobernadora Hochul a negar los permisos para convertir la estación generadora de Greenidge y las centrales eléctricas de Fortistar North Tonawanda en instalaciones de minería de criptomonedas:

“La minería de criptomonedas Proof-of-Work utiliza enormes cantidades de energía para alimentar los ordenadores necesarios para llevar a cabo el negocio. Si esta actividad se expande en Nueva York, podría socavar drásticamente los objetivos climáticos de Nueva York establecidos en la Ley de Liderazgo Climático y Protección de la Comunidad.”

La propuesta destacaba las ineficiencias de la autentificación de los PoW y sugiere que la repotenciación de las centrales eléctricas de combustibles fósiles en desuso estaría "poniendo en serio peligro el progreso del estado y el cumplimiento de los mandatos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI)".

Las empresas también citaron al Comisionado del Estado de Nueva York, Basil Seggos, del Departamento de Conservación del Medio Ambiente, diciendo que "Greenidge no ha demostrado el cumplimiento de la ley climática de Nueva York".

Citando la necesidad de una evaluación ambiental completa relacionada con las emisiones de gases de efecto invernadero, la carta le exige a la administración de Hochul negar los permisos de aire del Título V para las dos instalaciones de combustibles fósiles.

Al otro lado del mundo, las autoridades rusas están planeando introducir tarifas eléctricas especiales para los mineros de criptomonedas chinos recientemente desplazados.

El 13 de octubre, el ministro ruso de Energía, Nikolai Shulginov, sugirió un nuevo marco de consumo de energía para diferenciar las tarifas entre el uso general y la minería de criptomonedas, declarando:

“No podemos dejar que los mineros se aprovechen de la situación a costa de las bajas tarifas eléctricas residenciales.”

Según una investigación realizada por el New York Digital Investment Group (NYDIG), el consumo energético de Bitcoin (BTC) se mantendrá por debajo del 0.5%% del total mundial durante la próxima década. El estudio también sugiere que la huella de carbono de Bitcoin dependerá de las fluctuaciones del precio de Bitcoin, la dificultad de la minería y el consumo de energía.

Sigue leyendo: