El popular fabricante de zapatillas deportivas, Nike, ha iniciado la guerra de los "NFT con licencia", llevando a un revendedor en línea llamado StockX a los tribunales por infracción de marca o venta sin licencia de zapatillas en formato de token no fungible (NFT).

Según una nota de Reuters, Nike ha presentado una demanda contra el revendedor en un tribunal federal de Nueva York, exigiendo una cantidad no revelada en concepto de daños y perjuicios y el cese de las ventas de esos coleccionables digitales. Al parecer, StockX comenzó a vender NFT de zapatillas Nike en enero y prometió a los compradores que podrían obtener la versión física de las zapatillas en un futuro próximo.

Nike, en su denuncia de 50 páginas, alegó que StockX vendió cerca de 500 zapatillas NFT con la marca Nike, lo que ha hecho perjudicado su reputación y legitimidad. La marca de calzado también alegó que las zapatillas NFT se vendían a precios inflados con unas condiciones de compra y propiedad muy "turbias".

StockX es un popular revendedor en línea cuyo valor se estima en USD 3,800 millones, y sus zapatillas NFT en disputa siguen a la venta. La colección se llama "The Vault" y comprende nueve zapatillas de alta gama de Nike y acuerdos en NFT vinculados a su activo en el mundo real.

 

Nike afirmó que los NFT son una forma de que las marcas interactúen con sus clientes, pero algunos de los actores del mercado están tratando de "usurpar la buena voluntad de algunas de las marcas más famosas del mundo y utilizarlas sin autorización para comercializar sus productos virtuales y generar ganancias mal habidas". El fabricante de zapatos lanzará su propia colección de NFT a finales de este mes en asociación con RTFKT, un estudio de NFT recientemente adquirido.

 

La popularidad de los NFT ha hecho que se conviertan en una herramienta principal de relaciones públicas y marketing para las marcas y celebridades. Sin embargo, como ocurre con cualquier caso de uso popular en el mundo descentralizado, los NFT han llegado a un punto de explotación. Aparte de Nike, ha habido varios otros conflictos en torno a los NFT que implican a grandes marcas y celebridades. La productora cinematográfica de Pulp Fiction, Miramax, demandó al director de la película, Quentin Tarantino, por vender NFT de la película, calificándolo de infracción de los derechos de autor.