Por necesidad, por gusto o por obligación, cada día son más los venezolanos que se han visto forzados a utilizar-aceptar la criptomoneda del gobierno de Venezuela, el Petro.

La Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde), desde el mes pasado ha enviado a sus funcionarios a inspeccionar establecimientos en 17 entidades del país para ”defender el uso del petro“, en atención a la orden gubernamental de incorporar la criptomoneda en las finanzas comerciales y personales, de acuerdo a una nota aparecida en el importante medio local Tal Cual.

La medida del gobierno obedece a una simple razón: obligar a los comercios aceptar el pago en la criptomoneda de bienes y servicios, con el fin de masificar el uso del Petro en una economía cada vez más dolarizada.

Sin embargo la usabilidad del Petro está entredicho, después que algunas denuncias de comercios afiliados al sistema biométrico del principal banco de la nación, el Banco de Venezuela «BDV», indicaran que no aceptarían más pagos en la criptomoneda hasta tanto no se acrediten en sus cuentas el saldo correspondiente en moneda fiat local, el Bolívar«Bs».

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A lo anterior hay que sumarle que en gran parte del mes de enero, la plataforma principal para el uso de la criptomoneda -Patria-, estuvo en mantenimiento durante las primeras semanas, imposibilitando el uso del bono entregado a los empleados públicos y pensionados el pasado mes de diciembre.

A pesar de todo este panorama negativo alrededor del proyecto gubernamental, la Sundde fiscaliza los comercios con sistemas biopago, exhortándolos a utilizarlo para procesar los pagos en petros. Ahora alientan a quienes no lo tienen, a procurar y utilizarlo, toda vez que el gobierno, a través de sus diversos organismos, sigue insistiendo en el uso del criptoactivo.

Según declaraciones oficiales, el organismo planea inspeccionar más de 15,000 comercios que cuentan con el sistema biopago para la ”protección del petro” y señalan que hasta la fecha, más de 4,000 establecimientos han sido fiscalizados.

Por si fuera poco, SUNACRIP «Superintendencia Nacional de Criptoactivos y Actividades Conexas» también se ha unido a la batalla en todos los rincones del país, para dar a conocer la usabilidad de la criptomoneda respaldad en las reservas naturales energéticas de la nación caribeña.

Por ahora, el Petro ha comenzado a operar formalmente en instituciones gubernamentales como SAIME, SAREN, INEA,BAER, Bolipuertos y hasta en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, además de las órdenes presidenciales de que las cargas impositivas y las ventas de petróleo y minerales básicos se paguen con el criptoactivo.

En el lado opuesto de la acera, la expresidenta de uno de los organismo más representativos del comercio en Venezuela, Cipriana Ramos «CONSECOMERCIO», indicó que el hecho de que a los comerciantes les están reponiendo el dinero de sus ventas con Petros en sus cuentas bancarias 20 días después en moneda local, arroja pérdidas a los comercios y la imposibilidad de reponer inventario por la rápida devaluación que sufre el bolívar,  generando un problema más a la difícil situación económica.

Sentenció que esto ha tenido como consecuencia ”que los comerciantes no pudiesen pagar sus facturas y además muchos se quedaron sin mercancía”.

En ese mismo contexto, la investigadora del Observatorio de Derechos de Propiedad de Cedice Libertad, Ana Carrasquero, indicó que el Sundde está insistiendo a los comercios a la instalación ”obligatoria“ del biopago porque el gobierno tiene la intención de que se empiecen a hacer todas las operaciones con el Petro.

Por último, algunos economistas y analistas discrepan de la estrategia del gobierno venezolano de ”obligar” a los comercios y a los venezolanos en general a usar la criptomoneda estatal, debido a que con el uso del Petro no se aprecia un beneficio macroeconómico importante.

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