La privacidad de los datos es uno de los principales retos legales para la cooperación transfronteriza en la regulación de criptomonedas como Bitcoin y las stablecoins, según el organismo de control de riesgos del G20.
El Consejo de Estabilidad Financiera (FSB), una autoridad financiera mundial financiada por el Banco de Pagos Internacionales (BPI), ha identificado lagunas persistentes en la forma en que los gobiernos de todo el mundo regulan el mercado de las criptomonedas.
“Esta incoherencia crea retos como el arbitraje regulatorio, las lagunas de datos y la fragmentación del mercado”, escribió el FSB en un informe de revisión por pares de 107 páginas publicado el jueves.
Entre las cuestiones clave de la cooperación transfronteriza, el regulador destacó la división de las responsabilidades de supervisión entre múltiples autoridades en cada jurisdicción, los diferentes enfoques y, en particular, las leyes de privacidad.
El FSB quiere que se aborde la barrera de la privacidad
Según el FSB, la cuestión de la confidencialidad de los datos suele ser motivo de preocupación a la hora de identificar posibles riesgos sistémicos y, por lo tanto, de supervisar de manera eficiente las actividades transfronterizas relacionadas con los criptoactivos.
“Las leyes de secreto o privacidad de datos pueden suponer importantes obstáculos para la cooperación”, afirmó el regulador en el informe, añadiendo que algunas jurisdicciones restringen la capacidad de las empresas locales para compartir datos con reguladores de otras jurisdicciones.
Otra cuestión es que algunos actores se muestran reacios a compartir información sensible por temor a violaciones de la confidencialidad o a la falta de reciprocidad garantizada.
“Estas preocupaciones provocan retrasos en la tramitación de las solicitudes de cooperación y, en algunos casos, pueden prohibir o desalentar por completo la participación en acuerdos de cooperación”, escribió el FSB, añadiendo:
“Es probable que abordar estos retos fomente una cooperación transfronteriza más eficaz y eficiente en el panorama de los criptoactivos, en rápida evolución.”
Dado que la autoridad considera que la privacidad de los datos es un punto ciego clave para la aplicación de una regulación global eficaz de las criptomonedas, queda por ver qué soluciones puede proponer.
Los proveedores de datos carecen de precisión y coherencia
Si bien el FSB destaca la privacidad de los datos como un reto clave para abordar los riesgos de estabilidad financiera, la criptocomunidad lleva mucho tiempo tratando de protegerla como un derecho humano fundamental. Esto no hace que las transacciones de criptomonedas sean completamente imposibles de rastrear, pero el FSB subraya que los proveedores de datos de criptomonedas a menudo carecen de precisión, coherencia y exhaustividad.
“Las fuentes de datos reglamentarios siguen siendo limitadas, lo que lleva a las autoridades a depender en gran medida de los proveedores de datos comerciales, las encuestas y otras fuentes de datos incompletas o fragmentadas”, escribió el FSB.
Dado que el FSB señaló problemas similares en el suministro de datos hace casi cuatro años, parece que desde entonces se ha avanzado poco en la mejora de la calidad de los datos de criptomonedas.
Cointelegraph se puso en contacto con el FSB para recabar sus comentarios sobre posibles soluciones a los retos que plantean los datos, pero no recibió respuesta antes de la publicación de este artículo.
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