El jueves, comenzaron a circular noticias contradictorias en Rusia sobre el estado de los asuntos de regulación de las criptomonedas. En primer lugar, una nota de Reuters indicó que el Banco Central de Rusia está tratando de prohibir las criptomonedas, citando los riesgos para la estabilidad financiera y la explosión del volumen de transacciones. Si se promulga, la medida estaría en consonancia con los comentarios realizados por el presidente ruso Vladimir Putin el mes pasado, cuando declaró que las criptomonedas "conllevan grandes riesgos" en un foro de inversión en Moscú. El banco central del país está preparando actualmente un informe de asesoramiento sobre el tema.

Sin embargo, Anatoly Aksakov, presidente del Comité de Mercados Financieros de la Duma [Parlamento ruso], hizo la siguiente declaración en una rueda de prensa el mismo día, según informó el medio de noticias local interfax.ru y tradujo Cointelegraph:

"Existe un enfoque muy duro sobre la prohibición completa de las criptomonedas, como la adquisición o la propiedad. Existe [también] un enfoque en el que deben existir exchanges de criptomonedas adecuados, en los que todo esté legalizado, sea transparente y comprensible para los organismos reguladores. Sería más fácil para el Servicio Federal de Impuestos de Rusia gravar tales transacciones [de intercambio]".

El presidente Aksakov también expresó su apoyo a la regulación de la minería de criptomonedas en el país, citando factores como los impuestos a la minería y el consumo de electricidad de las empresas. Las autoridades del país dan prioridad al lanzamiento de un rublo digital y han promulgado medidas severas contra el sector privado de las criptomonedas, incluida la prohibición de que los fondos mutualistas inviertan en Bitcoin (BTC). Las cifras más recientes sugieren que los rusos realizan transacciones de unos USD 5,000 millones al año en criptomonedas.

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