La jueza Analisa Torres ha aprobado una solicitud de la Comisión de Valores y Bolsa (SEC) para extender el plazo de presentación de una presentación que podría poner fin al caso de Ripple Labs.
Documentos judiciales presentados el 1 de marzo otorgaron a la SEC una extensión para presentar sus materiales de descubrimiento relacionados con remedios presentados por Ripple. La extensión permite al regulador presentar su escrito inicial hasta el 22 de marzo. El plazo para la presentación del escrito de oposición de Ripple también se extendió hasta el 22 de abril, y el nuevo plazo para que la SEC presente una respuesta sería el 6 de mayo de 2024.
Un escrito relacionado con remedios es un documento que describe posibles remedios legales y acciones que podrían considerarse o emprenderse en relación con el litigio.
El caso de la SEC contra Ripple Labs comenzó en diciembre de 2020, cuando el regulador acusó a Ripple Labs, junto con su CEO Brad Garlinghouse y cofundador Chris Larsen, de llevar a cabo una oferta de valores no registrada de $1.3 mil millones a través de ventas del token XRP.
Según la SEC, el token debería ser clasificado como un valor y, por lo tanto, estar sujeto a estrictos requisitos regulatorios. Ripple, por otro lado, argumentó que XRP no es un valor y que la SEC no les proporcionó un aviso justo con respecto a su clasificación.
El litigio ha visto numerosos desarrollos y batallas legales a lo largo de los años. Un aspecto significativo es la discusión en torno a la "prueba Howey," que se utiliza para determinar si una transacción califica como un "contrato de inversión" bajo la ley estadounidense. Según la SEC, XRP cumple con las condiciones de la prueba Howey, mientras que Ripple argumenta lo contrario.
En un desarrollo importante en julio de 2023, la jueza Analisa Torres falló parcialmente a favor de Ripple Labs, determinando que XRP no era un valor en el contexto de sus ventas programáticas en bolsas de activos digitales. Sin embargo, la jueza también determinó que XRP se consideraba un valor cuando se vendía a inversores institucionales.
Cointelegraph se ha puesto en contacto con Ripple pero aún no ha recibido respuesta.
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