Octubre ha llegado con una bofetada de realidad política, pero con una dosis inesperada de euforia en los mercados. El corazón financiero del mundo, Wall Street, desafió toda lógica y cerró una semana de ganancias sólidas, llevando a sus principales índices, incluyendo el Dow Jones y el S&P quinientos, a establecer nuevos máximos históricos.
La paradoja es evidente: el optimismo de los inversores se dispara justo cuando el gobierno de Estados Unidos ha entrado en su tercer día de cierre parcial (shutdown). Es un escenario que históricamente debería inyectar miedo e incertidumbre, pero que en este ciclo parece funcionar como una simple distracción. La clave es que los grandes jugadores del mercado esperan que este cese de actividades sea efímero, sin tiempo suficiente para causar un daño profundo y duradero a la robusta economía estadounidense.
Más allá de la política de Washington, dos motores impulsan esta subida. El primero es la fiebre de la Inteligencia Artificial (IA). Los inversores están convencidos de que ninguna parálisis burocrática frenará el impulso tecnológico, manteniendo las acciones de este sector en la cima.
El segundo motor es más fundamental: la expectativa de dinero barato por parte de la Reserva Federal (Fed).
El cierre del gobierno ha provocado un "apagón de datos económicos". El Departamento de Trabajo no pudo publicar su crucial informe de nóminas de septiembre. Aunque esto podría parecer un problema, para Wall Street se convierte en la excusa perfecta. La ausencia de un dato robusto quita una potencial presión a la baja sobre las acciones y, al mismo tiempo, resta información vital que la Fed necesita para su próxima decisión sobre tipos de interés.
Y es precisamente aquí donde reside la apuesta. Los mercados ya están descontando que la Fed reducirá las tasas de interés en su reunión de finales de mes.
¿Por qué el optimismo por un recorte de tipos? La respuesta se encuentra en el mercado laboral. El reporte de nóminas privadas conocido hace unos días ya había mostrado su mayor caída desde marzo del año pasado, una clara bandera amarilla sobre el debilitamiento del empleo. Expertos señalan que esta información es lo suficientemente suave como para justificar una acción de la Fed.
Para los mercados financieros, esta perspectiva de un recorte es música para los oídos. La promesa de tasas de interés más bajas hace que el endeudamiento sea menos costoso, inyectando liquidez y aumentando el atractivo de los activos de riesgo, como las acciones. En este contexto, incluso el rendimiento del Bono del Tesoro, un indicador clave, se ha mantenido lo suficientemente bajo como para no estorbar el ascenso de los índices.
Y mientras la economía tradicional juega al tira y afloja con la política y la Fed, ¿qué ocurre con Bitcoin?
Bitcoin se encuentra en un periodo de relativa calma tensa. Tras la corrección típica de septiembre, el mercado cripto parece estar posicionándose para lo que muchos llaman el "Uptober" (octubre alcista). Aunque hemos visto volatilidad reciente, la demanda fundamental sigue siendo fuerte, con flujos de capital que, a pesar de las salidas, siguen siendo significativos a largo plazo.
El ambiente de recorte de tipos en EEUU, aunque beneficia directamente a las acciones, históricamente ha creado un entorno de mayor liquidez global, donde el dinero busca rendimientos fuera de la deuda y encuentra un refugio —o una oportunidad— en activos escasos y descentralizados como Bitcoin.
En definitiva, Wall Street está ignorando el drama del shutdown y las amenazas políticas (incluyendo advertencias del Tesoro sobre un golpe al Producto Interno Bruto y el cese de cientos de miles de trabajadores federales) y está centrando toda su atención en el posible rescate de la Fed: una desaceleración laboral que justifique tipos de interés más bajos, el catalizador perfecto para seguir marcando récords. El dinero, una vez más, tiene la última palabra.
Ahora bien, hablemos de las top criptonoticias de la semana según Cointelegraph en Español: Este no es un resumen de noticias. Este es un artículo de opinión. La intención es reflexionar sobre los siguientes titulares de un modo escéptico y crítico. Este es un artículo para libres pensadores.
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Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.
