Durante la reunión, Yellen abordó tres áreas relacionadas con la criptomoneda: especulación,
regulación y monedas digitales emitidas por el gobierno. Sobre la naturaleza de Bitcoin, comentó que aunque la criptomoneda ha experimentado un crecimiento notable en los últimos meses, sigue siendo un "activo altamente especulativo" y "no una fuente estable de valor". También señaló que Bitcoin sigue siendo una parte muy pequeña del sistema de pago global.
Yellen también comentó sobre la relación de la Fed con Bitcoin. Reiteró su posición del 2014 de que la Fed no tiene la autoridad para regular la criptomoneda. El miércoles, ella confirmó que el alcance del poder regulatorio de la Fed se extiende solo a aquellas instituciones bancarias que ya supervisan, indicando:
"La Fed realmente no juega ninguna función reguladora con respecto a Bitcoin, aparte de asegurar que las organizaciones bancarias que supervisamos estén atentos, que administren adecuadamente cualquier interacción que tengan con los participantes en ese mercado, y que controlen de manera adecuada el dinero responsabilidades de lavado y de secreto bancario que tienen."
Yellen señaló que la Fed no diferencia entre Bitcoin y cualquier otro tipo de moneda: el banco central es responsable de supervisar a otros bancos, independientemente de la moneda utilizada.
¿Un cripto-dólar?
Durante la conferencia, Yellen también hizo una distinción entre las monedas digitales descentralizadas como Bitcoin que no son emitidas ni dadas por ningún estado en particular, y las monedas digitales emitidas por los propios gobiernos.
Ella declaró que, aunque los banqueros centrales en todo el mundo están discutiendo la opción de hacer monedas digitales centralizadas que constituyan moneda de curso legal, en este momento, la Fed no tiene ninguna intención seria de introducir un dólar digital. Ella dijo:
"Realmente quiero advertir, esto no es algo que la Reserva Federal esté considerando seriamente en este momento. Si bien estamos investigando sobre este tema, hay, creo que a mi entender, beneficios limitados de su introducción, una necesidad limitada, por ello y algunas preocupaciones sustanciales."
Este año, varios gobiernos de todo el mundo han indicado su intención de investigar e implementar una moneda digital nacional. Solo en los últimos meses, los gobiernos de Cataluña y Rusia han declarado su interés en emitir sus propias monedas digitales oficiales. Otros estados, como Dubai, ya han decidido oficialmente hacerlo.
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