Partes que representan a denunciantes anónimos de la empresa de inteligencia artificial OpenAI habrían presentado una queja ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos por el supuesto uso por parte de la empresa de acuerdos ilegales de confidencialidad (NDA).
Los documentos enviados en exclusiva al Washington Post, según un informe, indican que un grupo de denunciantes asociados con OpenAI presentó una queja ante la SEC en junio alegando que la empresa hizo firmar a antiguos empleados acuerdos de confidencialidad restrictivos e ilegales con el fin de evitar que hablaran de seguridad y otras preocupaciones con los agentes federales.
¿Acuerdos de confidencialidad ilegales?
Según el Post, los documentos que recibió, enlazados aquí, fueron enviados al periódico por la oficina del senador Chuck Grassley:
"Una copia de la carta, dirigida al presidente de la SEC, Gary Gensler, fue enviada al Congreso. El Post obtuvo la carta del denunciante de la oficina de Grassley".
Grassley pareció ponerse del lado de los denunciantes en comentarios publicados por el Post. Afirmó que "las políticas y prácticas de OpenAI parecen tener un efecto amedrentador sobre el derecho de los denunciantes a hablar" y que "los acuerdos de confidencialidad de OpenAI deben cambiar".
El documento que hace referencia a la denuncia original —que aún no se ha hecho pública— iba dirigido específicamente al presidente de la SEC, Gary Gensler. El texto de la presentación apuntaba a la urgencia de la situación, afirmando que la SEC "debe tomar medidas rápidas y agresivas" para hacer cumplir las normas relacionadas tanto con las leyes de denuncia de irregularidades como con la orden ejecutiva del Presidente Biden que ordena a las agencias tecnológicas nacionales crear sistemas de IA seguros y fiables.
Aunque la orden ejecutiva de la Casa Blanca es esencialmente ineficaz —no hace referencia a ninguna ley y no establece ninguna sanción por incumplimiento— sí esboza la perspectiva de la actual administración hacia el sector.
La respuesta de OpenAI
La empresa parece estar tratando de distanciarse de sus prácticas pasadas relacionadas con los acuerdos de confidencialidad, pero no ha admitido haber cometido ninguna infracción en los comentarios aportados a la publicación.
Hannah Wong, portavoz de OpenAI, dijo al Post que la "política de denunciantes de OpenAI protege los derechos de los empleados a hacer revelaciones protegidas", y agregó que la compañía cree que "el debate riguroso sobre esta tecnología es esencial y ya hemos hecho cambios importantes en nuestro proceso de salida para eliminar los términos de no divulgación".
Cointelegraph se puso en contacto con OpenAI para hacer comentarios, pero no recibió una respuesta inmediata.
OpenAI se enfrenta actualmente a una serie de demandas por su presunto "raspado" de materiales con derechos de autor para entrenar su sistema ChatGPT, sin embargo, la firma continúa entintando asociaciones mientras supuestamente continúa avanzando hacia su próximo modelo de IA, supuestamente apodado "Strawberry".
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.