El proyecto de ley del Senado aborda la paradoja regulatoria de las criptomonedas: Valor vs. commodity

Desde su inicio, la industria de las criptomonedas de EE. UU. ha enfrentado un desafío regulatorio: determinar cuándo un criptoactivo califica como valor y cuándo califica como commodity.

Esta incertidumbre ha obstaculizado la adopción institucional, alimentado disputas legales y dificultado que las empresas de criptomonedas interpreten reglas complejas. Pero un proyecto de ley del Comité de Agricultura del Senado, liderado por el presidente John Boozman y el senador Cory Booker, propone cambios que pueden abordar esto.

El proyecto de ley es parte de un esfuerzo más amplio para establecer un marco unificado para los mercados de criptoactivos. El borrador de discusión bipartidista describe cómo EE. UU. podría clasificar los criptoactivos y asignar responsabilidades de supervisión. Marca un paso significativo hacia la resolución del prolongado debate sobre si los criptoactivos son commodities o valores.

Los proyectos de criptomonedas en EE. UU. han dudado durante mucho tiempo si necesitan registrarse en la Comisión de Valores. Las plataformas de trading han tenido dificultades para determinar qué tokens requieren licencias de valores. Los inversores institucionales se han abstenido porque las expectativas de cumplimiento no están claras. Y los traders de criptomonedas regulares han enfrentado un mercado fragmentado con protecciones inconsistentes.

La propuesta tiene como objetivo establecer una distinción federal clara entre commodities digitales y valores digitales.

¿Sabías que? En 2019, cuando Facebook anunció su proyecto Libra (más tarde renombrado Diem), los reguladores globales reaccionaron rápidamente. Los ministros del G7, los bancos centrales y el Congreso de EE. UU. expresaron su preocupación de que una empresa privada pudiera crear una moneda global. La reacción negativa se convirtió en un punto de inflexión para la regulación de las stablecoins en todo el mundo. El proyecto finalmente fue cerrado en enero de 2022.

¿Qué es una commodity digital?

El proyecto de ley introduce un nuevo concepto importante: la commodity digital. Bajo este plan, monedas como Bitcoin ( BTC ) y Ether ( ETH ) serían clasificadas como commodities digitales.

Una commodity digital es esencialmente un token intercambiable. Puedes poseerlo completamente y transferirlo directamente a otra persona sin un intermediario. Se registra en una blockchain pública y criptográficamente segura. Según el proyecto de ley, estas commodities digitales caerían bajo la Commodity Futures Trading Commission (CFTC) en lugar de la SEC.

Así es como el concepto de una commodity digital podría cambiar el escenario:

  • Reglas claras para grandes inversores: Si ciertas monedas son oficialmente etiquetadas como commodities digitales, los bancos, fondos y fiduciarios podrían mantenerlas sin arriesgar violaciones federales.

  • Menos incertidumbre: Las empresas ya no tendrían que preocuparse de que la SEC declare inesperadamente su token como un valor.

  • Dos mercados diferentes: Las commodities digitales consideradas “seguras” probablemente verían un mayor volumen de trading, más actividad de derivados y una mayor participación institucional. Los tokens que no califiquen permanecerían bajo la supervisión de la SEC.

¿Sabías que? Mucho antes de que las criptomonedas se generalizaran, EE. UU. clasificó Bitcoin como “propiedad” a efectos fiscales en 2014. Esto significa que cada trade de criptomonedas podría desencadenar un evento de ganancias de capital. Irónicamente, se convirtió en una de las primeras formas de regulación de criptomonedas en todo el mundo, anterior a su adopción masiva.

Clasificación de las monedas y un cambio en el poder regulatorio

El proyecto de ley aclara qué califica como commodity, pero no define completamente qué califica como valor. La clasificación de proyectos de finanzas descentralizadas (DeFi) , tokens de gobernanza y tokens híbridos se determinaría más adelante.

Si un token no encaja en la categoría de “commodity digital”, los exchanges, emisores y proveedores de wallets pueden esperar que caiga bajo la revisión de la SEC.

En términos generales, el proyecto de ley describe tres vías regulatorias:

  • Reglas claras para las materias primas, incluyendo criptoactivos importantes como Bitcoin y Ether

  • Supervisión más estricta, al estilo de los valores, para muchos utility tokensgovernance tokens y criptoactivos tokenizados

  • Requisitos estrictos para las nuevas emisiones de tokens, incluyendo divulgaciones y controles de cumplimiento.

El diseño de un token determina cómo será regulado. Tres factores clave importan: cuán descentralizado es, qué propósito cumple y cómo se vende. Estos elementos deciden si recae bajo la más flexible CFTC o la más estricta SEC.

Un cambio clave en el borrador del proyecto de ley es el cambio propuesto en el poder regulatorio. Históricamente, la SEC ha tenido la autoridad principal sobre las criptomonedas. Pero la nueva propuesta expande significativamente el rol de la CFTC, dándole supervisión sobre:

  • El mercado de negociación directa para materias primas digitales

  • Registro y supervisión de exchangesbrókeres y custodios que manejan estos criptoactivos

  • Nueva autoridad para la elaboración de normas, en algunos casos compartida con la SEC

  • La capacidad de recaudar tarifas para financiar sus deberes ampliados de supervisión de criptoactivos.

Esto marca un cambio importante con respecto a la dependencia de la SEC en las acciones de cumplimiento. El nuevo marco favorece un sistema regulatorio estructurado y predecible, lo que significa que la industria de las criptomonedas podría enfrentar menos acciones legales sorpresa y beneficiarse de reglas más claras y consistentes.

SEC vs. CFTC: Tabla comparativa regulatoria

Estándares operativos más estrictos para las firmas de criptomonedas

Más allá de la clasificación, el borrador del proyecto de ley establece requisitos operativos y de gestión de riesgos destinados a abordar las vulnerabilidades en el sector de las criptomonedas.

  1. Segregar fondos y evitar conflictos de interés: Los exchanges de criptomonedas tendrían prohibido combinar funciones de negociación, custodia, corretaje y creación de mercado dentro de una sola entidad. En su lugar, necesitarían separar estos roles, de forma similar a la estructura utilizada en las finanzas tradicionales.

  2. Listar solo criptoactivos no “fácilmente susceptibles a la manipulación”: Los exchanges de criptomonedas solo podrían listar materias primas digitales que cumplan con estándares específicos de integridad. Esto podría reducir significativamente el número de tokens poco fiables en las plataformas de EE. UU.

  3. Fortalecimiento de las protecciones al consumidor: El borrador propone:

  • Salvaguardar los criptoactivos de los clientes

  • Divulgaciones claras y completas

  • Registros de auditoría transparentes

  • Obligaciones de informes y cumplimiento normativo obligatorios.

Si se promulgan, estas medidas ayudarían a reducir el fraude, las fallas repentinas de proyectos y las insolvencias de los exchanges.

¿Lo sabías? El marco de Mercados de Criptoactivos (MiCA) de la UE, aprobado en 2023, se convirtió en el primer gran libro de reglas de criptomonedas del mundo. Desencadenó un aumento de las empresas de criptomonedas que se trasladaron a Europa en busca de claridad regulatoria.

Qué significa el borrador para los diferentes participantes del ecosistema de criptomonedas

El proyecto de ley propuesto para aclarar la regulación de las criptomonedas representa un momento crucial. Desde los exchanges establecidos y los inversores institucionales hasta los traders minoristas y las agencias federales, el marco afectaría a cada participante principal en el ecosistema de criptoactivos digitales.

Para los emisores de tokens

Los proyectos necesitarían evaluar si sus tokens califican como materias primas digitales. Cuanto más descentralizada sea una red y menos intermediarios utilice, más sólido será el argumento para el estatus de materia prima.

Los tokens que no cumplan con los criterios permanecerían bajo la supervisión de la SEC y enfrentarían requisitos potencialmente más estrictos.

Para los exchanges y brókeres

Las firmas necesitarían:

  • Separar las divisiones operativas

  • Registrarse en la CFTC

  • Adoptar sistemas de cumplimiento normativo más completos.

Aunque estos cambios podrían aumentar los costos, se espera que mejoren la confianza institucional y apoyen una estructura de mercado más madura.

Para los inversores institucionales

Los inversores institucionales son los que más se beneficiarían.

Los grandes gestores de activos han citado durante mucho tiempo la falta de reglas federales claras como el mayor obstáculo para añadir criptomonedas a las carteras. Con clasificaciones definidas y supervisión federal, los fiduciarios podrían estar más dispuestos a buscar una adopción a gran escala.

Para los usuarios minoristas

Los usuarios minoristas podrían ver menos esquemas fraudulentos, estándares operativos más altos y una mayor confianza en los criptoactivos regulados. Sin embargo, la gama de tokens no convencionales disponibles para la negociación podría reducirse.