En una entrevista con CNBC el 14 de junio, el legendario inversionista, Paul Tudor Jones, advirtió sobre la llegada de la inflación. Después de que el informe del índice de precios al consumidor (IPC) de la semana pasada mostrara que la inflación de EE.UU. había alcanzado un máximo de 13 años, el fundador de Tudor Investment abogó por tener 5% de una cartera invertido en Bitcoin (BTC).

Gestoras de fondos mutuos clasificadas por activos bajo gestión. Fuente: MutualFundDirectory.org

Cuando se combinan, las 50 gestoras de activos más grandes del mundo totalizan USD 78.9 billones en fondos bajo gestión. Una mera inversión del 1% en criptomonedas ascendería a USD 789 mil millones, que es más que la capitalización total de mercado de USD 723 mil millones de Bitcoin.

Sin embargo, existe un malentendido fundamental sobre cómo funciona esta industria, y esto es lo que impide una asignación del 1%, y mucho más una del 5%.

Investiguemos algunas de las grandes dificultades que el sector financiero tradicional tendrá que guardar antes de realmente subirse al carro de Bitcoin.

Dificultad #1: riesgo percibido

Invertir en Bitcoin sigue siendo algo muy difícil para las grandes gestoras de fondos mutuos, especialmente teniendo en cuenta su riesgo percibido. El 11 de junio, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de EE.UU. advirtió a los inversores sobre los riesgos del trading de futuros de Bitcoin, citando la volatilidad del mercado, la falta de regulación y el fraude.

A pesar de que varias acciones y materias primas tienen una volatilidad de 90 días similar o incluso mayor, de alguna manera, la atención de la agencia sigue sobre Bitcoin.

DoorDash (DASH), empresa que cotiza en los EE.UU. valorada en USD 49 mil millones, tiene una volatilidad del 96%, frente al 90% de Bitcoin. Mientras que, Palantir Technologies (PLTR), una acción tecnológica estadounidense valorada en USD 44 mil millones, tiene una volatilidad del 87%.

Dificultad #2: la exposición indirecta es casi imposible para las empresas con sede en EE.UU.

Gran parte de la industria de fondos mutuos, principalmente las gestoras multimillonarias de activos, no pueden comprar Bitcoin físico. No hay nada específico sobre esta clase de activos, pero la mayoría de los fondos de pensiones y vehículos 401k no permiten inversiones directas en oro físico, arte o tierras.

Sin embargo, es posible eludir estas limitaciones utilizando fondos cotizados en bolsa (ETF), notas cotizadas en bolsa (ETN) y fideicomisos de inversión negociables. Cointelegraph explicó anteriormente las diferencias y los riesgos asignados a los ETF y fideicomisos, pero eso solo toca la superficie, ya que cada fondo tiene sus propias regulaciones y limitaciones.

Dificultad #3: la regulación y los administradores del fondo pueden evitar las compras de BTC

Si bien la gestora de fondos tiene un control completo sobre las decisiones de inversión, debe seguir la regulación de cada vehículo específico y tener en cuentas los controles de riesgo impuestos por el administrador del fondo. Agregar nuevos instrumentos como los futuros de Bitcoin del Chicago Mercantile Exchange, por ejemplo, podría requerir la aprobación de la SEC. Los fondos Medallion de Renaissance Capital enfrentaron este problema en abril de 2020.

Aquellos que optan por los futuros de Bitcoin del CME, como Tudor Investment, tienen que renovar constantemente la posición antes de los vencimientos mensuales. Este problema representa tanto el riesgo de liquidez como el seguimiento de errores del instrumento subyacente. Los futuros no fueron diseñados para mantenerlos a largo plazo y sus precios difieren enormemente de los exchanges regulares al contado.

Dificultad #4: el sector bancario tradicional sigue siendo un conflicto de intereses

Los bancos son un actor relevante en este campo, pues JPMorgan, Merrill Lynch, BNP Paribas, UBS, Goldman Sachs y Citi figuran entre las gestoras de fondos mutuos más grandes del mundo.

La relación con las otras gestoras de fondos es estrecha porque los bancos son inversores y distribuidores relevantes de estos fondos mutuos independientes. Este enredo va incluso más allá porque los mismos conglomerados financieros dominan las acciones y las ofertas de deuda, lo que significa que, en última instancia, deciden la asignación de fondos mutuos en tales acuerdos.

Si bien Bitcoin aún no representa una amenaza directa para estos titanes de la industria, la falta de comprensión y la aversión al riesgo, incluidas las incertidumbres regulatorias, hacen que la mayoría de las gestoras de fondos profesionales de USD 100 billones a nivel mundial eviten el estrés de aventurarse en una nueva clase de activos.

Los puntos de vista y opiniones expresados aquí son únicamente los del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de Cointelegraph.com. Cada inversión y movimiento comercial implica riesgos, debes realizar tu propia investigación al tomar una decisión.

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