El 3 de julio, el Congreso de EE. UU. promulgó la Ley One Big Beautiful Bill. El proyecto de ley del presidente Donald Trump ofrece poco a la industria de las criptomonedas, pero podría beneficiar a Bitcoin de todos modos.
La propuesta de presupuesto de Trump se aprobó a última hora del 3 de julio siguiendo estrictamente líneas partidistas; solo dos republicanos votaron en contra del controvertido proyecto de ley, que aumentará significativamente la capacidad de endeudamiento del gobierno de EE. UU. Ha generado críticas importantes de los demócratas e incluso de aliados actuales y anteriores de Trump, como el CEO de Tesla, Elon Musk.
Notablemente ausentes del proyecto de ley fueron las enmiendas propuestas al código fiscal de las criptomonedas. A medida que el proyecto de ley avanzaba en el Senado, los legisladores intentaron añadir una serie de disposiciones relacionadas con las criptomonedas, pero sin éxito.
A pesar de la falta de disposiciones específicas sobre criptomonedas, los observadores del mercado son optimistas sobre los efectos indirectos que tendrá para Bitcoin (), pero se proyecta que estos se produzcan en medio de una agitación económica más amplia.
La Big Beautiful Bill fue aprobada sin ninguna enmienda sobre criptomonedas
Antes del 3 de julio, los observadores en el espacio de las criptomonedas anticipaban una reordenación del código fiscal estadounidense en torno a las criptomonedas.
El servicio de impuestos de criptomonedas Crypto Tax Made Easy señaló cláusulas en el proyecto de ley que redefinirían las reglas sobre airdrops, simplificarían los requisitos de declaración para el staking y crearían mejores excepciones de minimis, facilitando el gasto de criptomonedas sin desencadenar un evento fiscal.
Mientras el proyecto de ley aún estaba en debate en el Senado, la Senadora Cynthia Lummis también sugirió una enmienda que eliminaría el “doble impuesto” para los mineros de Bitcoin. Según Lummis, los mineros actualmente pagan impuestos dos veces, primero cuando reciben la recompensa de bloque y luego de nuevo cuando venden Bitcoin.
Aun así, el borrador del proyecto de ley que aprobó el Senado y pasó a la Cámara de Representantes no contenía ninguna cláusula sobre criptomonedas.
Según Decrypt, los esfuerzos por incluir disposiciones sobre criptomonedas fueron un “Ave María” en un proceso político ya plagado de luchas internas y negociaciones de último minuto.
El proyecto de ley aún puede beneficiar a Bitcoin, pero el panorama económico general no es bueno
A pesar de la falta de atención a los activos digitales, los observadores del mercado son optimistas de que Bitcoin podría experimentar un aumento significativo de precio, ya que los proyectos de ley elevan el techo de la deuda nacional —la cantidad de dinero que el gobierno puede pedir prestada— en 5 billones de dólares, una cantidad histórica.
Jessica Riedl, investigadora principal en el Manhattan Institute, dijo a The Washington Post: “El presidente Trump ha añadido más números rojos que cualquier presidente desde al menos LBJ [Lyndon B. Johnson], y lo está haciendo además de déficits que ya se habían disparado”.
El analista de criptomonedas Ranjay Singh dijo que, aunque puede haber altibajos a corto plazo, “más deuda puede llevar a más impresión de dinero. Eso es bueno para BTC a largo plazo”.
Nigel Green, CEO de la firma de asesoría deVere Group, dijo a Cointelegraph: “Los mercados ya han comenzado a responder. Los rendimientos a largo plazo están aumentando gradualmente. El petróleo ha subido. El oro y Bitcoin están subiendo ante los temores renovados sobre la erosión del poder adquisitivo”.
Aun así, mientras los hodlers de Bitcoin se regocijan al huir los inversores hacia activos resistentes a la inflación, el proyecto de ley y las ganancias de Bitcoin pueden tener un coste mayor para la economía mundial.
El proyecto de ley introducirá una serie de recortes fiscales para los más ricos de EE. UU. Se espera que los que ganan más de 1 millón de dólares vean un aumento en los ingresos después de impuestos de más del 3%, al mismo tiempo que se incrementan las deducciones fiscales estatales y locales de 10.000 dólares a 40.000 dólares para aquellos que ganan menos de 500.000 dólares al año. Las exenciones del impuesto sobre el patrimonio también se aumentaron a 15 millones de dólares.
El proyecto de ley tiene como objetivo compensar estas importantes reducciones fiscales y el aumento del gasto gubernamental con recortes en programas de beneficios críticos como el Supplemental Nutrition Assistance Program y Medicaid, así como ingresos procedentes de aranceles. Según Reuters, unos 10 países esperan cartas de la administración Trump anunciando aumentos de aranceles del 20%-30% el 4 de julio.
Green dijo: “Este proyecto de ley abre los grifos del gasto mientras estrangula el flujo de bienes globales. Es una apuesta de alto riesgo con la inflación, y una que el resto del mundo terminará pagando”.
Este aumento en el gasto gubernamental, junto con los aranceles sobre el comercio global, representa una “reordenación permanente del modelo de comercio y gasto”, afirmó.
Trump tiene previsto firmar el proyecto de ley para convertirlo en ley el 4 de julio, el Día de la Independencia de EE. UU.
Se acerca la semana cripto en Washington
Mientras la economía mundial y los beneficiarios de Medicaid se preparan para el impacto de la Big Beautiful Bill, los legisladores a favor de las criptomonedas en Washington ya están ocupados.
El 3 de julio, Lummis presentó un proyecto de ley individual para abordar sus objeciones antes mencionadas al código fiscal para mineros. El proyecto de ley también contiene una exención de minimis para transacciones de criptoactivos y ganancias de capital de 300 dólares o menos, con un límite anual de 5.000 dólares.
Mientras tanto, el Presidente del Comité de Finanzas de la Cámara de Representantes, French Hill, el Presidente del Comité de Agricultura de la Cámara de Representantes, Glenn Thompson, y el Portavoz Mike Johnson —todos republicanos— anunciaron que la semana del 14 de julio sería la “Semana Cripto”.
Los senadores quieren aprobar tres proyectos de ley separados en una semana, a saber, la CLARITY Act, el marco largamente esperado para la industria de las criptomonedas; la Anti-CBDC Surveillance State Act, que efectivamente prohibiría un dólar digital; y la GENIUS Act del Senado, que regula las stablecoins y establece estándares para los emisores.
A mediados de junio, Trump instó a los legisladores a tener la STABLE Act en su escritorio “lo antes posible”, particularmente antes de que el Congreso se tome un receso en agosto.
La industria de las criptomonedas parece estar saliéndose con la suya en Washington, mientras que la historia económica más amplia de la administración Trump es más controvertida.
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