Informan que Bithumb, el principal exchange de criptomonedas de Corea del Sur, va a emprender un litigio administrativo por la solicitud del pago de impuestos por un monto de 68.9 millones de dólares (80,000 millones de won).

El KoreaHerald, un medio de comunicación local en inglés, informó el 29 de diciembre que la agencia tributaria local ha solicitado más de 80 mil millones de won en impuestos al exchange.

Es el primer acontecimiento de este tipo en Corea del Sur

El medio de comunicación señala que, según documentos publicados por el mayor accionista de Bithumb, Vidente, a través de los servicios de supervisión financiera, el Servicio de Impuestos Nacionales obligó al exchange a pagar las retenciones sobre las actividades comerciales (trading) de los clientes extranjeros. Vidente se enteró del impuesto a principios de esta semana, después de adquirir una participación del 34.24% en la empresa matriz del exchange de criptomonedas.

El KoreaHerald explica que una corporación extranjera que no tiene un establecimiento permanente en Corea del Sur tiene que pagar el impuesto de retención. Sin embargo, tales reglas de impuestos no se han aplicado todavía a la industria del trading de la criptomoneda. Aunque acata el fallo, Bithumb piensa luchar para evitar el pago de la factura y considera un litigio administrativo.

Cointelegraph se ha puesto en contacto con Bithumb para obtener comentarios...

2019 para Bithumb

Este ha sido un año difícil para Bithumb. En junio, el exchange fue procesado por su presunta falta de adopción de medidas adecuadas para proteger la información personal, que luego fue presuntamente explotada por hackers para robar fondos de la plataforma. En marzo, más de un millón de EOS (unos 12.5 millones de dólares en ese momento) de Bithumb fueron desviados de su monedero en línea mediante un hackeo.

Como Cointelegraph explicó en un artículo dedicado en profundidad, en este año se han visto desarrollos significativos en lo que se refiere a los impuestos de la criptomoneda. Parece que los países alrededor del mundo se dieron cuenta que las criptomonedas están aquí para quedarse y, como resultado, ajustaron sus políticas de impuestos sobre criptomonedas para no perder los ingresos.

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