El exdirector general de BitMEX, Arthur Hayes, se entregó el martes a las autoridades estadounidenses en Hawai, seis meses después de que los fiscales federales presentaran por primera vez cargos contra él y otros tres ejecutivos de BitMEX.

En un comunicado, los abogados de Hayes describieron al residente en Singapur como "un empresario hecho a sí mismo que ha sido acusado erróneamente de delitos que no ha cometido", y añadieron:

“El Sr. Hayes compareció voluntariamente ante el tribunal y espera luchar contra estos cargos injustificados.”

Hayes quedó en libertad tras pagar una fianza de $10 millones a la espera de futuros procedimientos en Nueva York.

Los abogados de Hayes propusieron su entrega en Hawai el mes pasado. Las discusiones se centraron en la posible liberación de Hayes sujeta a la fianza de $10 millones, su retención de un pasaporte para viajar entre Singapur y Estados Unidos, y una renuncia a la extradición mutuamente acordada por ambas partes.

La representación de Hayes comenzó las conversaciones con el gobierno de Estados Unidos después de que su acusación fuera desvelada en octubre de 2020.

El gobierno acusa a Hayes, a los copropietarios de BitMEX, Ben Delo y Greg Dwyer, y al ex CTO de BitMEX, Samuel Reed, de violar la Ley de Secreto Bancario al no mantener las salvaguardias adecuadas contra el lavado de dinero y no evitar que los residentes de Estados Unidos accedieran al exchange a pesar de que la empresa no estaba registrada en la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas.

Reed fue detenido en octubre, mientras que Delo se entregó voluntariamente a las autoridades en Nueva York el mes pasado, y ambos se declararon inocentes y quedaron en libertad bajo fianza. Dwyer sigue prófugo, pero sus abogados declaran que han notificado al gobierno estadounidense el paradero de Dwyer y su intención de luchar contra los cargos que se le imputan.

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