El Presidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, ha firmado una ley que introduce impuestos sobre los criptoactivos mantenidos en el extranjero por ciudadanos brasileños.

Lula firmó la ley el 12 de diciembre, que se publicó al día siguiente en el Diário Oficial da União, o Diario Oficial de la Unión. La ley entrará en vigor el 1 de enero de 2024.

Los nuevos impuestos no se aplicarán exclusivamente a las criptomonedas, sino también a los beneficios y dividendos obtenidos por los contribuyentes brasileños de fondos de inversión, plataformas, bienes inmuebles o fideicomisos en el extranjero. El gobierno brasileño pretende recaudar alrededor de 20,000 millones de reales (USD 4,000 millones) de nuevos impuestos en 2024.

A aquellos que comiencen a pagar los impuestos en 2023 se les ofrece una ventaja anticipada: pagarán un gravamen del 8% sobre todos los ingresos realizados hasta 2023 en cuotas, y la primera cuota comenzará en diciembre. A partir de 2024, el tipo impositivo se fijará en el 15%. Los ingresos en el extranjero de hasta 6,000 reales brasileños (USD 1,200) estarán exentos de impuestos.

En declaraciones a Cointelegraph, João Carlos Almada, controlador del emisor brasileño de stablecoin Transfero, explicó que la tributación de los ingresos de activos digitales no es nueva en el país. Sin embargo, dijo que hay aspectos de la ley que podrían necesitar algunas aclaraciones:

“Algunos puntos del texto necesitan mejoras, por ejemplo, la compensación por pérdidas en el período, algo similar a las normas fiscales para los activos bursátiles. Creo que con la evolución de la reglamentación en el país, habrá nuevas discusiones sobre este tema, con el objetivo de dar aún más transparencia al mercado, generando así más credibilidad.”

Brasil no es el único país que vigila los holdings de criptomonedas de sus ciudadanos en el extranjero. En noviembre, la Agencia Tributaria española también recordó a sus ciudadanos su obligación de declarar las criptomonedas almacenadas en el extranjero. Sin embargo, esa exigencia sólo afecta a las personas físicas con balances que superen el equivalente a 50,000 euros (unos USD 55,000) en activos digitales.

Información adicional de Cassio Gusson

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