El cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, pide a las redes sociales que utilicen herramientas de criptografía y blockchain para que sus sistemas de clasificación de contenidos sean más transparentes y verificables.
En una publicación del lunes en X, Buterin argumentó que X debería utilizar pruebas de conocimiento cero (ZK-proofs) y blockchain para demostrar la imparcialidad del algoritmo que determina el alcance de los contenidos en la plataforma. El martes planteó una cuestión sobre el funcionamiento de X, alegando que la forma en que el propietario Elon Musk la dirige es perjudicial:
“Elon Musk, creo que deberías considerar que convertir X en un tótem global de la libertad de expresión y luego convertirlo en un láser de la Estrella de la Muerte para sesiones coordinadas de odio es, en realidad, perjudicial para la causa de la libertad de expresión.“
El responsable de IA de la Ethereum Foundation, Davide Crapis, reaccionó a esta idea inicial diciendo: "Si quieres afirmar que X es la plataforma para la libertad de expresión, deberías revelar tus objetivos de optimización del algoritmo". Añadió que "debería ser legible para los usuarios y modificable".
Buterin sugirió un sistema verificable que emplee pruebas ZK para cada decisión tomada por el algoritmo y marque con fecha y hora todo el contenido, los "me gusta" y los retuits en una cadena de bloques "para que el servidor no pueda censurar ni mentir sobre el tiempo". La plataforma también debería "comprometerse a publicar el código completo del algoritmo con un retraso de 1-2 años".
Las pruebas ZK son una forma criptográfica de demostrar que algo es cierto sin revelar los datos subyacentes, por ejemplo, demostrar que eres mayor de 18 años sin compartir tu nombre completo. Buterin no entró en detalles sobre lo que demostrarían las pruebas en su solución sugerida, pero es probable que mostraran que las decisiones algorítmicas seguían ciertas restricciones sin compartir detalles confidenciales.
Las criptomonedas se adentran en las redes sociales
La publicación de Buterin se hizo eco del sentimiento que hay detrás de algunas redes sociales descentralizadas conocidas como SocialFi. Aunque ninguna de estas iniciativas ha logrado una adopción generalizada, parece que sus equivalentes centralizados tradicionales se las toman en serio.
A principios de 2025, Meta, la empresa matriz de Facebook e Instagram, bloqueó los enlaces a un competidor descentralizado de Instagram llamado Pixelfed. Todos los enlaces a la plataforma fueron etiquetados como "spam" y eliminados inmediatamente. Otros afirmaron que los competidores de Facebook, incluido Mastodon, recibieron el mismo trato.
La criptocomunidad, con su tendencia a desconfiar del control centralizado, ha expresado su preocupación por el posible impacto de las decisiones tomadas por los responsables de las redes sociales en el pasado. Cuando Musk anunció a principios de enero que X daría prioridad a la promoción de contenidos considerados informativos o educativos frente a otros tipos de contenidos, muchos no quedaron convencidos.
Los críticos cuestionaron quién decidiría qué era válido y si la política podría convertirse en un vehículo para suprimir ciertos puntos de vista. Musk también ha sido acusado por críticos de limitar el acceso a las funciones premium a los usuarios que no estaban de acuerdo con él.
Buterin también intervino en ese momento. Instó a Musk a mantener su compromiso con la libertad de expresión en la plataforma y a no prohibir el acceso a los usuarios por mostrar su desacuerdo o expresar sus opiniones.
El impacto de las redes sociales en la sociedad
Las investigaciones han demostrado desde hace tiempo que las redes sociales tienen un impacto desmesurado en la sociedad y en el funcionamiento de los procesos democráticos. Un artículo publicado en 2024 sugería que "el acceso a Facebook puede aumentar la creencia en la desinformación".
Reuters también informó el mes pasado que recientes documentos judiciales sugerían que Meta había cerrado una investigación interna sobre los efectos de Facebook en la salud mental tras encontrar pruebas causales de que sus productos perjudicaban la salud mental de los usuarios. El estudio reveló que "las personas que dejaron de usar Facebook durante una semana informaron de menores sentimientos de depresión, ansiedad, soledad y comparación social".
La Unión Europea intentó abordar la cuestión con su Ley de Servicios Digitales, que exige transparencia en los principales parámetros de los algoritmos y obliga a las plataformas a evaluar el riesgo y divulgar las conclusiones sobre el posible impacto negativo de sus operaciones. Entre los impactos considerados explícitamente se incluyen "los efectos negativos en el discurso cívico y los procesos electorales, así como en la seguridad pública".
La Ley de Servicios Digitales también exige que los investigadores acreditados tengan acceso a los datos de las plataformas para estudiar su riesgo sistémico de forma independiente. El incumplimiento por parte de X de este requisito específico es una de las razones citadas por la Comisión Europea para imponer una multa de 120 millones de euros a principios de este mes.
Otras razones incluyen la falta de transparencia en el repositorio de anuncios de X y la marca de verificación azul de la plataforma, que supuestamente engaña a los usuarios, ya que "cualquiera puede pagar para obtener el estatus de ‘verificado’ sin que la empresa verifique de forma significativa quién está detrás de la cuenta".
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