China ha estado a la cabeza en lo que se refiere a los pagos digitales por media de consumidores en el país. Mientras que tales pagos en los Estados Unidos como el Apple Pay se están aceptando más ampliamente, en el cercano Japón tales métodos todavía son relativamente raros. Alipay les ha estado ofreciendo a los residentes de China la oportunidad de usar monedas fiduciarias para las transacciones diarias, aparentemente aclimatándolas para el día en que tanto el pago como las monedas se vuelvan 100% digitales.

El Banco Central de China flexiona sus músculos reguladores con las criptomonedas

Aunque China ha adoptado recientemente una postura algo más permisiva con respecto a los pagos en línea y digitales, ha respondido en su mayor parte al aumento de las criptomonedas con medidas más autoritarias. Después de que se supo que millones de Bitcoin estaban siendo minadospor ciudadanos chinos, el gobierno respondió prohibiendo todo comercio de criptomonedas en el país a partir de septiembre de 2017.

A pesar de la postura dura del gobierno chino contra las criptomonedas, el país también ha mostrado interés en la tecnología blockchain y en el desarrollo de una moneda digital del banco central. Está quedando claro que tiene sus propios planes a través de una regulación adicional. Según el Financial Times, el Banco Popular de China recientemente ha presentado solicitudes para más de 80 patentes, allanando el camino para el lanzamiento de una nueva moneda digital. 

Marc Kaufman, un socio y abogado de patentes en Rimon Law, le dijo al Financial Times:

“Prácticamente todas estas solicitudes de patentes se refieren a la integración de un sistema de moneda digital en la infraestructura bancaria existente.”

¿Qué significa esto para el futuro de las criptomonedas en China?

Estas solicitudes de patente son coherentes con la política reciente de China, que hace hincapié en su voluntad de adoptar la tecnología blockchain antes de permitir que holders de Bitcoin y otras criptomonedas influyan en el mercado. Como ha informado Cointelegraph, al gobierno chino parece gustarle el potencial de gestión segura de datos de la tecnología blockchain, pero no su naturaleza descentralizada y sin permisos, así como la especulación que permiten los criptoactivos.

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