El director de reestructuración y CEO de FTX, John Ray III, ha criticado el intento de los abogados de Sam Bankman-Fried de reducir su condena, alegando que las víctimas "han sufrido y siguen sufriendo".
Ray escribió al juez Lewis Kaplan el 20 de marzo en una declaración de impacto sobre las víctimas en nombre de FTX y sus "millones de víctimas acreedoras" para "corregir los errores materiales y las omisiones en la presentación de la sentencia" de Bankman-Fried.
La carta llega después de que los abogados de Bankman-Fried argumentaran el 19 de marzo que la guía de sentencia de 40 a 50 años de los fiscales del gobierno de Estados Unidos era demasiado dura.
Ray argumentó que las afirmaciones de Bankman-Fried de que FTX era solvente en el momento de la quiebra y que no se había perdido dinero eran "categórica, insensible y demostrablemente falsas".
“Los clientes seguirán sin estar nunca en la misma posición en la que habrían estado si no se hubieran cruzado en su camino con el Sr. Bankman-Fried y su supuesto 'altruismo'”
Ray declaró que ha dirigido un amplio equipo que ha pasado más de un año "dirigiendo el patrimonio desde un metafórico basurero en llamas" hasta una empresa que se acerca a un plan "que devolverá un valor sustancial a los acreedores".
"Las víctimas del Sr. Bankman-Fried nunca volverán a la misma posición económica en la que habrían estado hoy de no haber sido por su colosal fraude", añadió en otra parte de la carta.
Ray se hizo cargo del asediado exchange en noviembre de 2022 y detalló el extenso trabajo realizado por un ejército de abogados para recuperar activos, cooperar con las investigaciones y posicionar a la firma, que ahora planea devolver todo el valor a los acreedores.
Sin embargo, esta recuperación no borra el inmenso daño causado por los delitos de Bankman-Fried, dijo Ray.
Cuando asumió el cargo de CEO, declaró que sólo quedaban 105 bitcoin (BTC)) en FTX, frente a unos derechos de los clientes de casi 100,000 BTC.
"¿Por qué faltaban los bitcoins?", cuestionó antes de afirmar que un jurado ha "concluido más allá de toda duda razonable que el señor Bankman-Fried los robó y los convirtió en otras cosas".
Ray afirmó que Bankman-Fried consideró estrategias de relaciones públicas contradictorias después de la quiebra, incluyendo culpar al equipo de reestructuración al tiempo que afirmaba querer trabajar con ellos para reembolsar a los acreedores.
Ray dijo que era solo debido al caso de bancarrota del Capítulo 11 que la firma tenía activos que podrían repuntar en valor, refiriéndose al reciente repunte del mercado de criptomonedas.
"No se equivoquen; los clientes, los acreedores no gubernamentales, los acreedores gubernamentales y los accionistas no internos han sufrido y siguen sufriendo", concluyó.
Los abogados de Bankman-Fried argumentaron que una propuesta de condena de entre 40 y 50 años por un "delito no violento" era "medieval", al tiempo que solicitaron que se redujera a unos cinco o seis años y medio.
Bankman-Fried fue declarado culpable de siete cargos relacionados con diversos fraudes y lavado de dinero presentados contra él por el gobierno de Estados Unidos, casi un año después del colapso del criptoexchange.
Su sentencia está prevista para el 28 de marzo.
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