Bitcoin se mueve por las historias que se cuentan. Estas historias tienen que ser fáciles de recordar y de emocionar. Compradores y vendedores de Bitcoin se guían por lo que ven en las redes sociales, los medios de comunicación, los influencers, los expertos, los amigos, etc. Esto hace que el mercado sea muy ruidoso. A veces, hay historias que animan a comprar. A veces, hay historias que animan a vender. Otras veces, no hay una historia clara. Entonces, el mercado se vuelve incierto. Esto es lo que pasa ahora en el corto plazo. Mucho ruido y poca claridad.
El mercado de las criptomonedas vive entre sueños y pesadillas. Hace unos meses, soñó con los ETF, los fondos que prometían más inversión y más confianza. Pero el sueño se convirtió en pesadilla cuando el precio se hundió tras la aprobación. El mercado se desilusionó y entró en coma.
Los veteranos saben que el mercado es volátil e irracional. Que hay que tener calma y perspectiva. Pero la mayoría son novatos que se guían por las emociones. Que se asustan o se emocionan con facilidad.
El mercado está despertando poco a poco. Pero aún no sabe qué rumbo tomar. Quiere creer que algo grande está por venir, pero no tiene certeza. Está en un limbo, esperando una señal.
El presente es una mezcla de duda y esperanza. ¿Qué será lo que despierte al mercado? ¿Una buena o una mala noticia? ¿Una sorpresa? Solo el tiempo lo dirá.
El ruido del mercado
Para ilustrar lo que quiero decir con el ruido del mercado, imagina que quieres comprar un libro. Antes de comprarlo, entras en una red social donde hay muchas opiniones sobre el libro. Algunas son muy positivas y te animan a comprarlo. Otras son muy negativas y te desaniman. Otras son contradictorias o confusas. No sabes a quién creer ni qué hacer. Te sientes abrumado por tanto ruido.
Esto es lo que pasa en el mercado Bitcoin a corto plazo. Hay tantas opiniones, noticias, rumores, predicciones, análisis, etc. que es difícil saber qué es verdad y qué es mentira, qué es relevante y qué es irrelevante, qué es importante y qué es trivial. El ruido del mercado puede influir en tu decisión de comprar o vender Bitcoin, pero no te garantiza que sea la mejor decisión.
La claridad del valor
Ahora imagina que, en vez de fiarte de las opiniones de la red social, buscas información más objetiva y fiable sobre el libro. Por ejemplo, lees la sinopsis, el índice, el prólogo, algunas páginas, las reseñas de expertos, las ventas, los premios, etc. Así te haces una idea más clara y precisa del valor y la calidad del libro. Esto te ayuda a tomar una decisión más informada y acertada.
Esto es lo que pasa a largo plazo. En el largo plazo, lo que importa son los datos y los hechos. Los datos y los hechos nos muestran cómo funciona Bitcoin, cómo se usa, cómo se desarrolla, cómo se regula, cómo se innova, cómo se compite, cómo se demanda, cómo se oferta, etc. Los datos y los hechos nos muestran el valor real de Bitcoin, basado en su utilidad, su escasez, su seguridad, su descentralización, su transparencia, su inclusión, su libertad, etc. El valor real de Bitcoin es lo que determina su precio a largo plazo.
La regla de los grandes números
Para entender mejor la diferencia entre el corto y el largo plazo, imagina que quieres saber cuántas veces saldrá cara al tirar una moneda muchas veces. Según las matemáticas, la mitad de las veces debería salir cara. Pero si tiras la moneda pocas veces, puede que salga más o menos veces de lo que esperas. Por ejemplo, si tiras la moneda 10 veces, puede que salga cara solo 3 veces, o el 30%. Esto no quiere decir que la moneda sea tramposa o que las matemáticas estén mal, sino que es cosa del azar y de que las cosas cambian mucho cuando son pocas.
La regla de los grandes números nos dice que, si tiras la moneda muchas veces, el número de veces que saldrá cara se parecerá más al 50%. Esto es porque los resultados raros o extraños se equilibran con los resultados normales o comunes, y la media se acerca a lo que debería ser. Por ejemplo, si tiras la moneda 100 veces, puede que salga cara 47 veces, o el 47%, que es más parecido al 50% que el 30% de antes. Si tiras la moneda 1000 veces, puede que salga cara 497 veces, o el 49.7%, que es casi el 50%.
Aplicando la regla de los grandes números al mercado Bitcoin, podemos decir que es más fácil saber cómo van a cambiar los precios de las cosas en el futuro lejano que en el futuro cercano. Esto es porque, en el futuro cercano, los precios pueden variar mucho por cosas que no se pueden controlar, como el ruido, la especulación, las emociones, la información desigual y otros factores que crean dudas y movimientos. En el futuro lejano, en cambio, los precios se ajustan al valor real de las cosas, basado en cómo funcionan las empresas y los sectores. Por eso, las predicciones que se basan en el análisis fundamental, que mira los aspectos de calidad y cantidad de las empresas y los sectores, suelen ser más exactas y seguras en el futuro lejano que las predicciones que se basan en el análisis técnico, que mira los patrones y tendencias de los precios pasados.
Conclusión
Predecir los mercados financieros es difícil, pero más fácil a largo plazo que a corto plazo. A corto plazo, el mercado Bitcoin es muy ruidoso e incierto, y se mueve por las historias que se cuentan. A largo plazo, el mercado Bitcoin es más claro y estable, y se mueve por los datos y los hechos. Por eso, creo que no existe claridad sobre el precio de Bitcoin a corto plazo. El inversor inteligente siempre es muy escéptico con las opiniones y el sentimiento del mercado en el corto plazo. Observa y escucha. Pero nunca acepta ciegamente.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.