El 21 de julio, la representación legal de GNY, una empresa centrada en la inteligencia artificial y el emisor de LML, presentó una notificación final de incumplimiento de los deberes por parte de los liquidadores del exchange. El liquidador en cuestión es la firma de contabilidad, Grant Thornton, a la que GNY acusa de estropear el manejo del hackeado y ahora extinto exchange de criptomonedas Cryptopia.

Tal aviso es el paso final antes de una demanda, lo que se sumaría a un ya complicado caso que busca devolver los fondos de el exchange afectado.

El ataque y el drenaje distribuido de los fondos

Los hackers accedieron a Cryptopia, un exchange de criptomonedas con sede en Nueva Zelanda, durante dos semanas en enero de 2019, obteniendo un estimado de NZD 23 millones (USD 16 millones).

GNY declaró NZD 27,228,202.35 (aproximadamente unos USD 18 millones) en su denuncia con los acreedores el año pasado. Según los analistas, la empresa perdió en algún momento cerca de 492 Bitcoins (BTC): USD 2.5 millones al momento de la denuncia, que ahora serían aproximadamente unos USD 4.5 millones al momento de esta publicación.

Grant Thornton, por su parte, ha manifestado en el pasado que los plazos que se muestran en el caso no eran razonables.

Posibles problemas de ética alientan la demanda

Alegando las recientes faltas éticas por parte de Grant Thornton, un representante de GNY le dijo a Cointelegraph que a este último le preocupaba que el primero ignorara a los acreedores con el interés de llenar sus propios bolsillos.

Hablando con Cointelegraph, Cosmas Wong, fundador y CEO de GNY, describió la persecución más como algo de tratar conseguir un asiento en una mesa, diciendo que Grant Thornton había ignorado las denuncias de la empresa durante todo el proceso de liquidación:

"El mayor problema es que ellos (Grant Thornton) tuvieron nuestra denuncia desde el principio. Nuestra denuncia fue antes de la liquidación de la empresa".

"No esperamos que nos devuelvan el dinero. Eso no es lo que sucede en una liquidación, pero esperamos que admitan nuestra denuncia", explicó Wong. "En este momento, parece que están tratando de fingir que no estamos allí".

Esto se alinea con las declaraciones anteriores de Wong en nombre de GNY. Al anunciar una demanda contra Cryptopia antes de su liquidación el año pasado, Wong escribió: "Nuestras motivaciones para presentar una denuncia contra Cryptopia trascienden del dinero". En esa misma línea, le dijo a Cointelegraph que "no buscamos los tokens de nadie".

En una declaración brindada a Cointelegraph, los representantes de Grant Thornton Nueva Zelanda escribieron: “Entendemos que este es un momento difícil para los acreedores. Sin embargo, las acusaciones hechas por este acreedor carecen de mérito y las negamos por completo". Advirtieron además "que es difamatorio hacer afirmaciones falsas en el dominio público".

El hackeo de Cryptopia fue el primero de una extensa serie de hackeos que vivieron algunos exchanges en 2019. La ley detrás de cómo distribuir los activos de un fallido exchange de criptomonedas continua sin ser establecida.

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