La Agencia de Internet y Seguridad de Corea (KISA) ha afirmado que los ciberdelincuentes con base en Corea del Norte han intensificado sus ataques de malware contra los usuarios de monedas digitales y proveedores de servicios en Corea del Sur. La agencia dijo además que los piratas informáticos también se han dirigido a las empresas de divisas digitales en el país.

Basado en su último reporte de mediados de noviembre de 2017, KISA ha monitoreado un aumento del 370 por ciento en ataques de malware en 2017 en comparación con las cifras de 2016. Estos ataques muestran que los hackers han sido consistentes en sus esfuerzos por interrumpir las operaciones diarias de las compañías , robar dinero y manchar aún más la imagen de las monedas digitales.

Las criptomonedas como Bitcoin han sido tomadas como herramienta para los perfectos ciberdelitos en el pasado.

Otros aspectos destacados del informe KISA

Según el informe KISA, se registraron 5.366 ataques de ransomware en Corea del Sur de enero a septiembre de 2017. La lucha en curso entre Corea del Norte y Corea del Sur se considera una de las principales razones detrás de la intensificación de los ataques de malware en los establecimientos de Corea del Sur.

Esto es particularmente cierto en los meses de julio y agostoen el cual se descubrió software malicioso en múltiples sistemas de escritorio internos de muchas bolsas de bitcoins de Corea del Sur.

Según la agencia, espera que los ataques a los proveedores de servicios de Bitcoin y otros servicios en línea en Corea del Sur continúen intensificándose en el futuro cercano a menos que se emprenda una acción estratégica para frustrar los ataques en el futuro. Esta visión de la agencia se basa en la reputación de hackers de Corea del Norte, que han lanzado ataques feroces contra la infraestructura de Corea del Sur en los últimos años.

La presencia contínua de los grupos de piratas informáticos patrocinados por el estado en Corea del Norte también se espera que empeore la situación. Debido a estos desarrollos, los ciudadanos y las empresas de Corea del Sur deberían tomar esta amenaza más en serio y colaborar con el gobierno para prevenirla.