Adrienne Harris, directora del Departamento de Servicios Financieros de Nueva York (NYDFS), se reunió recientemente con Stuart Alderoty, director legal de Ripple, para discutir la regulación de criptomonedas en el evento Ripple Swell en Miami, Florida.
La discusión giró en torno a los diferentes enfoques adoptados por varias organizaciones regulatorias a nivel estatal y federal, y cómo los actores de la industria de las criptomonedas pueden navegar mejor por estas aguas a veces turbias.
Plan a cinco años
Según Harris, lo mejor que pueden hacer las empresas de criptomonedas cuando se trata de lidiar con regulaciones gubernamentales es ser transparentes y proactivos al tratar con los reguladores.
Adrienne Harris and Stuart Alderoty at Ripple Swell 2024. Source: Cointelegraph
A mitad de la conversación, Alderoty preguntó a Harris: “¿Qué consejo le darías a la industria cuando nos presentemos a hablar con los reguladores?”
Su respuesta:
“Nunca, jamás, deberías sorprender a tu regulador. No nos gustan las sorpresas. El mejor consejo que puedo dar es que si leemos sobre ello antes de escucharlo, ya estamos en el pie equivocado”.
Harris afirmó que los reguladores no deberían enterarse de problemas en la industria de las criptomonedas a través de los medios de comunicación, sino que deben esperar una comunicación abierta con las empresas y sus representantes legales.
Citando las opiniones progresistas de Nueva York sobre las criptomonedas, en comparación con las regulaciones federales de EE.UU., Harris dijo que las empresas de criptomonedas deberían “venir, hablar con nosotros sobre su plan de negocio a cinco años”.
Regulación de las criptomonedas
EE. UU. parece haber quedado rezagado en comparación con Europa y muchas otras jurisdicciones en lo que respecta a la regulación de las criptomonedas.
Inicialmente, las elecciones presidenciales de EE. UU. de 2024 parecían poder convertirse en un referéndum sobre la política y la agenda de las criptomonedas, al menos para aquellos en la industria cripto. Sin embargo, ambos candidatos presidenciales han expresado sentimientos positivos hacia el sector cripto durante sus campañas.
Esto ha dejado a los partidarios de la industria divididos, algunos apoyando a Donald Trump, citando la falta de progreso regulatorio del presidente en funciones Biden, y otros a favor de la plataforma económica aparentemente progresista de Kamala Harris.
Como informó recientemente Cointelegraph, el cofundador y presidente ejecutivo de Ripple, Chris Larsen, contribuyó con XRP valorado en aproximadamente $1 millón a la campaña de Harris.
El equipo de Trump, por su parte, afirma haber tenido 100,000 inscripciones para su proyecto de token World Liberty Financial.
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