La Agencia de Servicios Financieros de Japón (FSA) ha emitido una tercera orden de mejora comercial para el propietario de Zaif, Tech Bureau. La noticia fue reportada por Cointelegraph Japón hoy, 25 de septiembre.
Tal cual se informó anteriormente, como resultado de una violación de seguridad en la bolsa de Zaif el 14 de septiembre, los hackers lograron robar 6700 millones de yenes ($59,7 millones) en criptoactivos pertenecientes tanto a los usuarios como a la propia bolsa. La Agencia de Servicios Financieros ya había ordenado a la Oficina Técnica que realizara mejoras en el negocio primero en marzo, y posteriormente en junio de este año.
La FSA considera que la investigación de Tech Bureau sobre las causas del reciente jaqueo, así como su respuesta a los clientes, han sido inadecuadas. Mientras que la empresa anunció que estaba en conversaciones con el Grupo Fisco para recibir apoyo financiero de 5000 millones de yenes el viernes 21 de septiembre, la FSA dice que no recibió un informe concreto sobre el asunto directamente de la empresa.
La nueva orden de mejora comercial de la FSA especifica los siguientes contenidos como medidas necesarias que deben abordarse con urgencia:
“(1) Determinación de los hechos y las causas del incidente que fue el jaqueo (incluida la aclaración de la atribución de responsabilidad) y [la] formulación y ejecución de medidas para impedir que se repita".
(2) Prevención de la expansión de los daños a los clientes
(3) Respuesta a los daños del cliente
(4) Revisar e implementar planes de mejora concretos y efectivos basados en el incidente que fue el jaqueo, [así como] el contenido de [dos órdenes de mejora de negocio anteriores] del 8 de marzo y 22 de junio [de este año].
(5) Presentar los informes escritos correspondientes a los puntos (1) y (4) anteriores antes del jueves 27 de septiembre.”
Según CT Japón, el personal de la FSA sigue realizando inspecciones in situ de la oficina técnica. Sobre la base de sus conclusiones, la agencia podría emitir medidas más estrictas, como una orden de suspensión de comercio y/o la cancelación del registro de la bolsa.
A principios de este verano, la FSA publicó los resultados de sus inspecciones in situ de los operadores de bolsas de criptomonedas, y decidió, sobre la base de sus conclusiones, aplicar una supervisión más rigurosa a las nuevas aplicaciones de los mercados que esperaban recibir una licencia oficial de operación. Según la agencia, actualmente hay "cientos" de empresas a la espera de su revisión.
Tras el récord en la criptoindustria del jaqueo de $532 millones de la bolsa Coincheck, el año ha sido testigo del desarrollo de una serie de medidas cada vez más exigentes para los operadores nacionales.