Cuando se piensa en países que están por delante de la curva en la adopción de las criptomonedas, Turquía podría no ser el primer lugar que me viene a la mente. Sin embargo, las estadísticas de la Global Consumer Survey para 2019 muestra que una quinta parte de los residentes turcos están familiarizados con las criptomonedas y han estado expuestos a ella de una forma u otra. Si las cifras son ciertas, el 20% es la proporción más alta de todos los países del mundo.

Volando bajo el radar, Turquía se ha convertido sin duda en un gigante de las criptomonedas, y con el presidente Recep Tayyip Erdoğan anunciando recientemente que las pruebas de la lira digital se finalizarán en 2020, las criptos estás destinadas a ser aún más popular.

De hecho, observando el rápido crecimiento de la criptomonedas y la tecnología Blockchain en el país, Cointelgraph ha presentado este año la edición turca de nuestro portal. Este artículo fue escrito en asociación con su equipo y, en particular, con el editor, Erhan Kahraman.

Los turcos siempre fueron pro-cripto

Mientras que el gobierno del país era inicialmente reacio a adoptar las criptomonedas, la gente siempre había encontrado utilidad en ello. Una encuesta realizada por ING en abril de 2015 reveló que el 45% de los turcos creían que las monedas digitales como Bitcoin (BTC) eran el futuro del gasto en línea. Este porcentaje es el más alto de todos los países europeos encuestados, superando con creces la media europea del 28%.

Esta mayor aceptación de las criptomonedas indica que los turcos utilizan más fácilmente los dispositivos móviles para actividades financieras. La misma encuesta mostró que el 56% de los turcos habían utilizado aplicaciones de pago por móvil, en contraste con la media de los consumidores europeos del 33%.

El sector de pagos en línea en Turquía había estado listo para adoptar las criptomonedas, pero la primera oportunidad sólo llegó cuando PayPal fue prohibido en el país tras el rechazo de su licencia por parte de la Agencia de Regulación y Supervisión Bancaria. El uso de las criptomonedas en el país aumentó a niveles sin precedentes para llenar el espacio de pago en línea.

Barış Özistek, presidente tanto del fondo de capital de riesgo Boğaziçi como de la compañía de publicación de juegos Netmarble EMEA, atribuyó la gran adopción de las criptomonedas al importante mercado de los videojuegos del país, diciendo a Cointelegraph: "Hay más de 30 millones de jugadores activos en Turquía. El juego es una esfera en la que el equipo virtual y la moneda digital se utilizan por primera vez, y se utilizan con mayor frecuencia". Y añadió:

"Los usuarios turcos ya sabían que los materiales virtuales aumentan de valor cuando la oferta y la demanda se crean en los mercados, o dependiendo de su popularidad, pueden disminuir de valor. Es por eso que los usuarios turcos adoptaron las criptomonedas muy rápida y fácilmente. Por supuesto, un alto porcentaje de personas que saben leer y escribir digitalmente entre los usuarios turcos y estar informados sobre el comercio en nuestro pasado histórico fueron factores que contribuyeron a la situación".

La adopción de las criptomonedas en Turquía es sorprendente

En agosto de 2014, Cointelegraph entrevistó al fundador de QuazarCoin, que se hace llamar Orhan, sobre el estado de las criptomonedas en Turquía. En ese momento, el ambiente regulatorio en el país no era el ideal, ya que la nación había prohibido Twitter en medio de una creciente incertidumbre política.

En esa entrevista, Orhan dijo que Turquía no era el mejor lugar para desarrollar criptomonedas, ni siquiera Bitcoin en sí mismo, ya que el país no tenía ningún marco ni la estabilidad política establecida para tratar con la tecnología. Añadió que: "Creo que esta es la razón por la que la gente conectada a Bitcoin o a criptomonedas alternativas no quiere mostrar su cara o su verdadero nombre al público en general." Estas son críticas duras para un país que se convertiría en un líder mundial en la adopción de criptomonedas sólo cinco años después de que se pronunciaran estas palabras.

En 2017, el gobierno turco fue noticia con otro gran impulso contra las criptomonedas. El gobierno afirmó que Bitcoin era "incompatible" con el Islam debido a la naturaleza especulativa de su compra y venta. Sin embargo, Ozistek dijo recientemente a Cointelegraph que cree que la tecnología Blockchain y las criptomonedas son pro-islamistas, diciendo: "En lugar de ser haram, la tecnología Blockchain y las criptomonedas están más de acuerdo con las reglas de las finanzas islámicas". Luego me lo explicó:

"Cuando se trata de criptomonedas, si el proyecto gana valor, también lo hace la criptomoneda. No se gana dinero con el dinero. Si el proyecto en el que invirtió gana valor, la criptomoneda que tiene también gana valor; si el proyecto falla, su criptomoneda pierde valor. No incluye un ingreso garantizado, como los intereses".

La incertidumbre económica es una de las principales causas de adopción

La situación política de Turquía durante la última década ha sido difícil. Las relaciones con sus complicados vecinos, Irak y Siria, colocan al país en el centro de uno de los conflictos internacionales más violentos de la historia reciente. Además, la relación del país con las superpotencias globales, Rusia y Estados Unidos, tampoco ha sido siempre muy buena.

Todos estos factores se unieron para hacer de la lira turca una de las monedas nacionales más volátiles. La volatilidad no fue el único factor que llevó a la migración del país hacia las criptos. Fue la incertidumbre asociada con la moneda, también. Şant Manukyan, el director de mercados internacionales en İş Yatırım, dijo a Cointelegraph sobre el tema:

"Cuando se compara con otros países que incluyen Argentina o países con infraestructura colapsada como Venezuela, la situación de Turquía es muy diferente, y mejor. Bitcoin se destaca en estos países como una protección contra la devaluación y como una forma de llevar el dinero al extranjero. En Turquía, ofrece una alternativa a los inversores que utilizan el dólar pero buscan ganancias, pero no es tan común como en otros países con seguridad".

El fallido golpe de Estado de julio de 2016 provocó un fuerte descenso del precio de la lira. El hundimiento de la lira en agosto de 2018 marcó dos años de incertidumbre económica. Junto con las malas relaciones políticas con Estados Unidos y la inminente crisis de la deuda, la alta inflación y las bajas tasas de interés, fue una tormenta perfecta para que un país que ya estaba preparado para la tecnología adoptara las criptomonedas.

La correlación de los países económicamente afectados y la alta adopción de las criptomonedas se puede ver en otras partes del mundo - como Venezuela, Irán y Zimbabwe - dando crédito a la teoría de la Hiperbitconización. Yasin Oral, CEO y fundador del exchange Paribu, dijo a Cointelegraph:

"Cuando un país atraviesa una crisis económica, hace que los inversores busquen nuevos canales y mercados sin problemas. Además, la fluctuación del tipo de cambio da paso a nuevas herramientas de inversión. En Turquía, el cripto dinero y los demás activos digitales fueron aceptados como un nuevo medio de inversión gracias a una población que puede adaptarse fácilmente a las nuevas tecnologías. Si presta atención a las encuestas locales, los propietarios de cripto dinero planifican los activos digitales como inversiones a largo plazo y realizan transacciones de forma activa".

Criptomonedas y Blockchain

El Ministerio de Industria y Tecnología de Turquía anunció planes para establecer una infraestructura nacional Blockchain durante su presentación de la Estrategia 2023 el 18 de septiembre en Ankara. El plan requiere trabajar con los reguladores turcos para ayudar a crear una sandbox reguladora para las aplicaciones Blockchain. Esto acompañó a varias implementaciones de tecnología Blockchain, como el Centro de Innovación y Blockchain de Estambul, conocido como Centro BlockchainIST.

Hablando sobre los políticos del país que se suben al carro de las criptomonedas antes de tiempo, Ozgur Guneri, el CEO del exchange BTCTurk, dijo a Cointelegraph que cree que los políticos turcos están deseosos de ver lo que la Blockchain y la criptomonedas pueden traer a la mesa, añadiendo que:

"Las últimas decisiones políticas importantes fueron el objetivo del Banco Central de Turquía de lanzar una criptomoneda y la decisión de la Junta de Investigación de Crímenes Financieros de flexibilizar su estricta postura hacia las criptomonedas. Creo que la mayor motivación detrás del interés de Turquía en las criptomonedas y tecnología Blockchain es su tecnología revolucionaria y todo el potencial disruptivo que pueden traer a la economía".

Turquía tiene la visión de convertir a Estambul en un centro financiero, y todas las instituciones están trabajando en ese sentido. Hablando sobre el difícil camino para hacer de Turquía un centro financiero mundial, Özistek dijo que no será una tarea fácil quitarle ese estatus al Reino Unido y a Suiza:

"Al hacer las inversiones necesarias en criptomonedas y tecnología Blockchain, y al crear infraestructura y regulaciones legales, Turquía puede superar a sus fuertes rivales como valedor la tecnología. Creo que esta es la motivación principal".

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