El Tesoro de Su Majestad publicó un muy esperado documento de consulta para la próxima regulación de las criptomonedas en el Reino Unido. El extenso documento de 80 páginas abarca una amplia gama de temas, desde los problemas de las stablecoins algorítmicas hasta los tokens no fungibles (NFT) y las ofertas iniciales de monedas (ICO).

Según ha declarado el Tesoro, las propuestas pretenden situar al sector de los servicios financieros del Reino Unido a la vanguardia de las criptomonedas y evitar las medidas de control estrictos que han cobrado impulso en todo el mundo en medio del actual mercado bajista.

El Tesoro anunció que no habrá un régimen regulador separado para las criptomonedas, pues entrarán en el marco de la Ley de Servicios y Mercados Financieros del Reino Unido de 2000 (FSMA). El objetivo es igualar las condiciones entre las criptomonedas y las finanzas tradicionales. Sin embargo, el principal regulador financiero británico, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA), adaptará las actuales normas de la FSMA al mercado de activos digitales.

Al menos una molestia de esa decisión es la obligación de que los participantes en el mercado de criptomonedas repitan el procedimiento de registro. Ya han tenido que someterse al proceso bajo el régimen de licencias de la FCA, pero ahora tendrán que ser evaluados "con respecto a una gama más amplia de medidas".

La buena noticia es que, a diferencia de las finanzas tradicionales, las empresas de criptomonedas no tendrán que comunicar sus datos de mercado con regularidad. Sin embargo, los exchanges estarían obligadas a conservar esos datos y ponerlos a disposición en todo momento.

El Tesoro se desvió de algunos de sus homólogos internacionales y decidió no prohibir las stablecoins algorítmicas. En su lugar, las calificará como "criptoactivos sin respaldo", no como "stablecoins". No obstante, los anuncios publicitarios tendrían que excluir el término "estable" de la comercialización de las monedas algorítmicas.

Se estudiaría un régimen regulador independiente para las plataformas de criptopréstamos y, según el documento de consulta, debería hacer que los prestamistas tuvieran en cuenta una valoración adecuada de las garantías y los planes de contingencia en caso de quiebra de las principales contrapartes de mercado de los participantes.

Las primeras reacciones al documento de consulta fueron optimistas. Binance no escatimó tiempo en dar la bienvenida al documento. En declaraciones a Cointelegraph, el director de política de Ripple para EMEA, Andrew Whitworth, lo calificó de "gran paso":

"A partir de hoy, el gobierno debe fomentar una mayor colaboración con el sector privado para diseñar un marco integral basado en el riesgo, que se ajuste a las mejores prácticas internacionales".

Nick Taylor, responsable de política pública para la región EMEA del exchange mundial de criptomonedas ,Luno, considera que este es un momento crucial para el sector. Comentó:

"Aunque aún queda camino por recorrer antes de que entren en vigor las nuevas normas, nos anima la magnitud de la ambición del gobierno".

La consulta se cerrará el 30 de abril de 2023. Hasta entonces, el gobierno británico agradecerá las respuestas de todas las partes interesadas, incluidas empresas de criptomonedas, instituciones financieras, asociaciones comerciales, organismos representativos, académicos, bufetes de abogados y grupos de consumidores.

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