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La solución de capa 2 de Bitcoin, Bitlayer, lanzó recientemente su puente BitVM de confianza minimizada, que utiliza asociaciones directas con pools de minería para desbloquear la liquidez de Bitcoin para DeFi sin el riesgo de contraparte centralizada de los tokens envueltos tradicionales.

Para los usuarios de América Latina y otros mercados emergentes, Bitcoin (BTC) ha representado durante mucho tiempo una herramienta poderosa para la soberanía plena, una forma de almacenar valor y realizar transacciones sin depender de intermediarios.

La ironía es que para usar este criptoactivo de finanzas descentralizadas (DeFi) sin confianza, los usuarios se han visto obligados a volver a confiar. Durante años, la principal puerta de entrada, Wrapped Bitcoin (WBTC), ha requerido que los usuarios entreguen sus criptoactivos a una federación centralizada de custodios.

Aunque es funcional, este modelo reintroduce el mismo riesgo de contraparte que muchos poseedores de Bitcoin buscan evitar. Sin embargo, las soluciones de capa 2 de Bitcoin como Bitlayer están diseñando una forma de cerrar esta brecha, con el objetivo de desbloquear la liquidez de Bitcoin para DeFi sin comprometer sus principios fundamentales.

De intermediarios centralizados a un puente de confianza minimizada

El problema fundamental con los tokens envueltos tradicionales radica en su modelo de seguridad. WBTC opera con un sistema multifirma federado, lo que requiere que la mayoría de sus custodios actúen con honestidad para asegurar el puente.

Este sistema crea un punto centralizado de fallo; si una mayoría se viera comprometida, los criptoactivos podrían estar en riesgo. Para las plataformas DeFi y las startups de criptomonedas en regiones como América Latina, integrar una solución así significa pedir a sus usuarios que acepten una suposición de confianza significativa.

La respuesta de Bitlayer es su puente BitVM lanzado recientemente, una tecnología que introduce un paradigma de seguridad fundamentalmente diferente. Es un sistema de confianza minimizada, lo que significa que solo requiere un único participante honesto para garantizar la integridad del puente y la seguridad de todos los criptoactivos.

Esta única parte honesta puede hacer cumplir las reglas del protocolo y desafiar cualquier actividad fraudulenta, eliminando la necesidad de confiar en una mayoría. Para los usuarios que ven Bitcoin como un escape de la dependencia de terceros de confianza, esta característica es una distinción crucial.

Fuente: Bitlayer

La sala de máquinas de una nueva economía

Esta avanzada tecnología de puente es posible gracias a una innovación técnica clave y una alianza estratégica. El puente BitVM se basa en transacciones no estándar para ejecutar operaciones complejas como pruebas de fraude en la red de Bitcoin.

Para asegurar que estas transacciones sean minadas on-chain, Bitlayer ha formado asociaciones directas con algunos de los pools de minería de Bitcoin más grandes del mundo, incluyendo Antpool, F2Pool y SpiderPool. Juntos, estos socios representan más del 30% del hashrate global de Bitcoin.

Con esta infraestructura fundamental en su lugar, Bitlayer está construyendo un ecosistema robusto. El proyecto está respaldado por importantes firmas institucionales como TPC Ventures (LATAM), Franklin Templeton, Polychain, Framework y ABCDE. A principios de agosto de 2025, recaudó con éxito 5 millones de dólares en una preventa sobresuscrita en plataformas.

Este impulso se está traduciendo en utilidad cross-chain. En agosto, Bitlayer anunció su primera integración con el ecosistema de Solana a través de asociaciones con los exchanges descentralizados Orca y Kamino. Este desarrollo siguió a una integración de puente similar con la red Sui en mayo, lo que permitió que el criptoactivo envuelto de Bitlayer, YBTC, se desplegara en nuevos entornos DeFi.

Al resolver el complejo desafío del puente de confianza minimizada, Bitlayer ofrece un nuevo camino a seguir. Para las plataformas DeFi en América Latina y más allá, esto significa la capacidad de ofrecer a sus usuarios una forma de participar en la economía on-chain utilizando su Bitcoin, sin pedirles que comprometan el mismo principio de auto-soberanía que los atrajo al criptoactivo en primer lugar.

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