La codicia ha vuelto y ya volvieron las predicciones. No hay nada más popular en este espacio que las predicciones del precio. La gente prefiere los números grandes y no se requieren muchas explicaciones para causar un impacto. En lo que se refiere al precio, todo lo demás pasa a un segundo plano. Aquí no hay ideología que vale. El precio de Bitcoin es rey. ¿Qué tan lejos llegará el precio esta vez? ¿Alcanzaremos el máximo histórico este año? ¿Cuándo llegaremos a USD 500.000? 

He aquí una verdad inconveniente: Nadie conoce el futuro. Todas las predicciones son falsas. En el fondo, son solo suposiciones. Adivinanzas. Son más apuestas que pronósticos. No obstante, el predecir es un hábito inevitable. Necesitamos hacer proyecciones para invertir. Se podría decir que lo difícil no es tanto el acto de predecir. Lo difícil es predecir con precisión. Después de todo, no hay que ser un genio para saber que Bitcoin subirá de precio en los próximos años. Lo complicado es colocarle un monto exacto y una fecha exacta a esa predicción. Sabemos lo suficiente para comprar con optimismo. Pero no sabemos lo suficiente para ser precisos.

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La mayoría de los analistas anuncian un número basándose en una corazonada. Ese es el método más común en este mercado. Es el método de los ilusos. Aquí nos domina el pensamiento ilusorio. Soñamos con un número. Y ese número se convierte en nuestra predicción. Así de sencillo. Se trata del bitcoiner clarividente que percibe el futuro de manera instintiva. Su fe es casi religiosa. Pero me temo que es la misma fe que siente un apostador al entrar a un casino. 

Por otro lado, tenemos el método inductivo. Un método mucho más sensato. Consiste en estudiar los patrones del pasado y medir las probabilidades. Este método no garantiza el resultado en un 100%. Pero es mucho más razonable que una corazonada. El problema con este método es que muchos se lo toman demasiado en serio. Llevado a un extremo, uno podría caer en el error de pensar que el futuro es como el pasado. Entonces, las predicciones se convierten simplemente en un estudio de las gráficas del pasado. De este modo, el precio de Bitcoin sube vertiginosamente sin mayores trabas. Después de la corazonada, el método inductivo (malentendido) es el método preferido de este mercado.

Otro método es la predicción por indicadores. Hay indicadores mejores que otros. Pero todos emiten señales falsas. Lo mejor es confirmarlos con otros indicadores. El indicador de sentimiento puede darnos una idea general de cuándo vender y cuándo comprar. Y el comportamiento del dólar y los bonos del Tesoro pueden ayudarnos a medir el humor de los inversores. No obstante, todos estos indicadores nos pueden indicar una tendencia. Pero difícilmente nos indican un número exacto en una fecha determinada.

 

Mike Novogratz, CEO de Galaxy Digital, ve un gran futuro para Bitcoin, y hace un pronóstico de 500.000 dólares por unidad dentro de 10 años. Ese es otro modo de decir que Bitcoin podría lograr la capitalización del oro en una década. Obvio que Mike aquí está utilizando al mercado del oro como referencia. Muchos bitcoiners podrían decir que la predicción de Mike es sumamente conservadora. De hecho, algunos piensan que ese objetivo lo lograremos en unos pocos meses. Después de todo, estamos hablando de un incremento de 10X. Nada del otro mundo para Bitcoin. 

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Ahora bien, aquí hay dos acotaciones para el que piense que el pasado es el futuro. En primer lugar, el capital no es infinito. Es imposible que Bitcoin suba y suba sin parar. ¿Por qué no? Sencillo. El dinero se acaba. En segundo lugar, Bitcoin, en la medida que aumente de tamaño, disminuirá en rendimiento. Es decir, la segunda década no será como la primera en términos de rendimientos. Algunos analistas hablan de la escasez de Bitcoin para determinar su precio. Sin embargo, hablan muy poco de la demanda. Y la demanda es fundamental. Dependemos del capital disponible para la inversión. Y, lamentablemente, este capital es finito. No es lo mismo lograr una capitalización de un billón de dólares que alcanzar una capitalización de varios billones.

En fin, no se trata de colocar un número y ya. También debe ser un número posible. El mercado del oro, por ejemplo, es gigantesco. Los países son compradores de oro. Los grandes fondos son compradores de oro. Y los grandes capitales son compradores de oro. Sin embargo, estamos hablando de un mercado de 8-10 billones de dólares. Si Bitcoin logra obtener una capitalización similar al oro, estamos hablando de 500.000 dólares por unidad aproximadamente. Lo que quiere decir que no es cuestión de simplemente añadir ceros a nuestras predicciones. 

Por último, debemos aceptar que los ciclos alcistas no duran para siempre. La actual política monetaria no durará toda la vida. Tarde o temprano, la Reserva Federal se verá en la obligación de retirar liquidez del sistema. Eso significa menos dinero para la inversión. Si bien es cierto que todavía es posible crecer en ese ambiente, el crecimiento siempre es más lento. El pronóstico de Mike Novogratz nos resulta bastante conservador, porque estamos en un periodo de alta codicia y el optimismo está por las nubes. Obviamente, el mercado está plagado de expectativas falsas. 

Ahora la gran pregunta: ¿El pronóstico para fin de año? Ser preciso es muy difícil. Pero podemos hablar de la tendencia. Y la tendencia es claramente alcista. Por otro lado, el último trimestre del año tiende a ser muy bueno para los mercados. Lo que implica que es probable que superemos nuestro máximo histórico este año. En otras palabras, podemos ser optimistas. 

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Manifestar escepticismo ante las predicciones muy exactas no significa que somos escépticos del potencial de Bitcoin. No ganamos nada con creer en todo lo que nos dice. Con saber que la tendencia es alcista, tenemos. Se compra con la esperanza de que podremos vender a un mejor precio en el futuro. Y sabemos que invertir en Bitcoin es mejor que cualquier otra alternativa. Si bien es cierto que la segunda década de Bitcoin no será igual que la primera, podemos estar seguro de que Bitcoin todavía es una excelente inversión.

 ¿Bitcoin valdrá USD 500.000? Seguramente. ¿Cuándo? En algunos años. ¿En los próximos meses? Probablemente no. Sin embargo, nada hacemos con vivir de ilusiones. La fortuna favorece a los pacientes. Bitcoin está creciendo en tamaño y eso afecta su rendimiento. Pero debemos recordar que el S&P 500 crece en un 15% durante un año excelente. Un crecimiento de 2X o 3X todavía es un crecimiento espectacular. ¿USD 65,000 para fin de año? ¿USD 80,000? ¿USD 100,000? Me sirve.