Alexander Vinnik, operador del desaparecido exchange de criptomonedas BTC-e, fue devuelto a Rusia como parte de un intercambio de prisioneros con Estados Unidos.
Vinnik llegó a Moscú a bordo de un avión Mitsubishi Challenger procedente de Estambul (Turquía) y aterrizó en el aeropuerto internacional de Vnukovo a última hora del 13 de febrero, según la agencia de noticias estatal rusa TASS.
El operador de BTC-e fue liberado a cambio del profesor estadounidense Marc Fogel, repatriado el 11 de febrero. Fogel estaba bajo custodia rusa desde 2021, tras su detención en un aeropuerto por posesión ilegal de cannabis.
El ciudadano ruso fue detenido en Grecia en 2017 y extraditado a Estados Unidos en agosto de 2022. En mayo de 2024, se declaró culpable de conspiración para cometer lavado de dinero en su papel como operador de BTC-e de 2011 a 2017.
BTC-e era un exchange muy utilizado entre actores ilícitos. Una investigación de Cointelegraph Magazine descubrió que BTC-e era un servicio de lavado favorecido; grandes cantidades de Bitcoin (BTC) ilícito se convertían en Ether (ETH) a través de la oferta inicial de monedas de Ethereum, intercambiando efectivamente BTC sucio por ETH limpio. Los rastros de las transacciones en la cadena de bloques también vincularon al extinto exchange con el infame hackeo de Mt. Gox.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, BTC-e procesó más de 9.000 millones de dólares en transacciones y prestó servicio a un millón de usuarios en todo el mundo. El socio de Vinnik, Aleksey Bilyuchenko, sigue en la lista de los más buscados del Servicio Secreto de Estados Unidos por su papel en el funcionamiento de BTC-e.
El canje de prisioneros se produce antes de una posible reunión entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente ruso, Vladímir Putin, en Arabia Saudí, donde podrían tener lugar conversaciones de paz relativas a la guerra entre Rusia y Ucrania. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, ha rechazado cualquier negociación sobre el futuro de Ucrania que no incluya a su país.
El vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, ha advertido al Kremlin de sanciones y posibles acciones militares si Putin no acepta un acuerdo de paz que garantice la independencia de Ucrania, informó The Wall Street Journal.
Mientras hablaba en una reunión de la OTAN en Bruselas el 12 de febrero, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, dijo que el que Ucrania recuperara sus fronteras anteriores a 2014 era un objetivo poco realista, y agregó que la administración de Trump no considera que la membresía de Ucrania en la OTAN sea un camino viable.
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