El precio de Bitcoin es como una montaña rusa: sube y baja sin parar. A veces parece que hay más gente que quiere subirse al carro, y otras veces parece que todos quieren bajarse. ¿Qué hace que el precio cambie tanto? ¿Es solo cuestión de oferta y demanda, o hay algo más?
Muchos creen que el precio de Bitcoin depende de la entrada de dinero nuevo al mercado. Es decir, de que haya más personas que se interesen por esta criptomoneda y la compren con su dinero fiat (euros, dólares, etc.). Sin embargo, esto no es necesariamente cierto. Hay otras razones que pueden hacer que el precio de Bitcoin suba sin que haya dinero nuevo.
Una de ellas es la compra por parte de los “bitcoiners” antiguos. Estos son los que llevan años invirtiendo en Bitcoin y confían en su potencial. Cuando el precio de Bitcoin se disparó y alcanzó su máximo histórico, supieron que era el momento de vender y obtener beneficios.
Pero no se alejaron del mercado, sino que esperaron a que el precio bajara de nuevo, aprovechando las fluctuaciones naturales de la oferta y la demanda. Entonces, volvieron a comprar más monedas, aumentando así su cantidad de Bitcoin y reduciendo la disponibilidad para otros compradores. Esto puede generar un efecto de escasez y hacer que el precio suba.
Otra razón es el efecto del apalancamiento. Este es un truco que usan los traders para comprar más Bitcoin de lo que podrían con su propio dinero. ¿Cómo lo hacen? Pues pidiendo prestado o dejando algo de valor como garantía. De esta forma, pueden aumentar sus beneficios (o sus pérdidas) si el precio del Bitcoin se mueve en la dirección que esperan. Esto hace que el precio del Bitcoin se vuelva más sensible y reaccione con más fuerza a los cambios del mercado. Es como si Bitcoin tuviera un altavoz que amplificara su sonido.
Una tercera razón es la manipulación del mercado. Algunas personas o grupos intentan alterar el precio de esta criptomoneda con acciones deshonestas o ilegales. Por ejemplo, pueden inventar noticias falsas para crear pánico o expectativa, manipular el volumen de trading para hacer creer que hay mucha demanda o poca oferta, o coordinar compras o ventas masivas para provocar subidas o bajadas repentinas. Estas acciones pueden confundir a los inversores y hacer que el precio de Bitcoin se aleje de su valor real.
Estas razones pueden explicar por qué el precio de Bitcoin puede subir sin dinero nuevo, al menos a corto plazo. Pero para que el precio de Bitcoin crezca de forma sostenida a largo plazo, es necesario que haya un flujo constante de nuevos inversores y capital. Esto es lo que realmente le da valor a esta criptomoneda.
Desde que se lanzaron el 11 de enero de 2024, han tenido un gran éxito entre los inversores, que han depositado un estimado de 7.7 mil millones de dólares en estos fondos. Esto quiere decir que hay más gente comprando que vendiendo estos ETF, lo que indica un interés creciente por Bitcoin. Además, la mayoría de este dinero es nuevo, es decir, que viene de inversores que no tenían exposición previa a Bitcoin.
Claro que sí hubo una conversión de un instrumento antiguo (Grayscale Bitcoin Trust), que causó algunas salidas de dinero, pero que fue compensada por la entrada de mucho más dinero en los nuevos ETF. Así, se puede afirmar que los ETF de Bitcoin están logrando atraer a nuevos inversores, que ven en estos fondos una forma fácil y segura de invertir en esta criptomoneda. Sin embargo, quizás el número de nuevos inversores no sea tan alto como algunos esperaban, ya que todavía hay muchos que prefieren comprar Bitcoin directamente o a través de otras plataformas.
Ciertamente, el mercado de las criptomonedas está viviendo un momento histórico con la aprobación de los primeros ETF de bitcoin al contado en Estados Unidos. Esto supone una mayor facilidad, seguridad y regulación para el sector.
Sin embargo, ¿qué impacto tiene esto en el flujo de dinero nuevo al mercado? Algunos creen que los ETF de bitcoin atraerán a una gran cantidad de capital institucional y minorista que hasta ahora se mantenía al margen por la complejidad o el riesgo de las criptomonedas. Otros, en cambio, piensan que los ETF de bitcoin no son tan innovadores ni revolucionarios, ya que existen otros productos similares como los fideicomisos o los futuros, y que el dinero nuevo que entra al mercado es limitado o incluso inexistente.
La realidad es que ambos puntos de vista tienen algo de razón, pero también de exageración. Lo que sí es cierto es que el mercado de las criptomonedas está en constante evolución y crecimiento, y que cada día surgen nuevas monedas, proyectos y servicios que ofrecen valor y utilidad a los usuarios. Estas son las verdaderas buenas noticias que hay que tener en cuenta, más allá del hype o el escepticismo que rodean a los ETF de bitcoin.
La facilidad de inversión y la creciente demanda por parte de asesores financieros podrían ser factores importantes para atraer más inversores a este mercado en el futuro. Los ETF de Bitcoin ofrecen una forma sencilla, segura y regulada de acceder a la exposición de esta criptomoneda, sin tener que preocuparse por la custodia, la volatilidad o el riesgo de hackeo. Además, permiten diversificar el portafolio y aprovechar las oportunidades de arbitraje.
Sin embargo, los ETF de Bitcoin también tienen sus limitaciones y riesgos. Por ejemplo, no permiten tener el control total de las monedas, ya que dependen de un intermediario que las gestiona. Tampoco reflejan fielmente el precio de Bitcoin, ya que pueden tener una prima o un descuento respecto al mercado. Y por supuesto, están sujetos a las regulaciones y las fluctuaciones del mercado tradicional.
Por eso, en una nota final, creo que los ETF de Bitcoin no son la única ni la mejor forma de invertir en esta criptomoneda. Creo que muchos “bitcoiners” prefieren tener sus propias monedas, usando billeteras personales y plataformas descentralizadas. Creo que los ETF de Bitcoin son una herramienta más, pero no la esencia de este movimiento. En fin, ¡bienvenido dinero nuevo!
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.