La nueva guía regulatoria de Estados Unidos que permite a los bancos convertirse en validadores para redes blockchain es un paso importante para la adopción institucional, pero agrava los riesgos de centralización, informó Bohdan Opryshko, director de operaciones del proveedor de servicios de staking Everstake, a Cointelegraph.

El 7 de marzo, la Oficina del Contralor de la Moneda de Estados Unidos (OCC) suavizó su postura sobre cómo los bancos pueden interactuar con criptomonedas, incluyendo permitir a los bancos participar “en redes de verificación de nodos independientes”, dijo el regulador en su declaración.

Opryshko dijo que el aumento de la participación de los bancos de EE. UU. en redes de prueba de participación (PoS), como Ethereum y Solana, podría ser un “arma de doble filo”.

“Si los bancos se convierten en validadores dominantes, el poder podría concentrarse, reduciendo la naturaleza descentralizada de las redes PoS”, dijo Opryshko a Cointelegraph el 12 de marzo.

Los flujos financieros adicionales hacia las redes PoS también podrían suprimir los rendimientos del staking, lo que podría perjudicar a los validadores más pequeños, añadió.

“Si grandes actores institucionales, como los bancos, entran al mercado de staking y de repente realizan grandes cantidades de staking, […] podría causar una reducción drástica en las recompensas de staking para todos los demás participantes”, afirmó Opryshko.

Rendimientos del staking al 12 de marzo. Fuente: Staking Rewards

A partir del 12 de marzo, los stakers de Ether ganan aproximadamente un 5,5% de APR, y los stakers de Solana ganan cerca de un 8%, según datos de Staking Rewards.

El staking implica asegurar las blockchains al publicar criptomonedas como garantía con validadores a cambio de recompensas.

Debacle del “debanking”

El anuncio de la OCC llegó después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, prometiera poner fin a una represión regulatoria prolongada que restringía el acceso de las empresas de criptomonedas a los servicios bancarios.

La indignación de la industria de las criptomonedas por el llamado “debanking” alcanzó su punto álgido cuando una demanda de junio de 2024 liderada por Coinbase resultó en la publicación de cartas que mostraban que los reguladores bancarios de EE. UU. pidieron a ciertas instituciones financieras “pausar” las actividades bancarias con criptomonedas.

En una orden ejecutiva del 23 de enero orden, Trump —quien ha prometido hacer de América la “capital mundial de las criptomonedas”— dijo a las agencias que priorizaran el “acceso justo y abierto a los servicios bancarios” para las empresas de activos digitales.

Al 12 de marzo, Anchorage Digital es el único banco estadounidense con carta federal que ofrece staking de criptomonedas.

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