Un miembro de la junta directiva del Banco Central Europeo (BCE) ha argumentado que las monedas estables como la tan esperada moneda de Facebook, Libra, suponen un riesgo para las prioridades de política pública.

El miembro del Consejo de Administración del BCE, Benoit Coeure, presentó sus comentarios sobre las cuestiones de regulación de las monedas estables en una reunión celebrada en el Banco de Pagos Internacionales (BPI) en Basilea, Suiza, Reuters informó el 16 de septiembre. Coeure específicamente declaró:

"Las stablecoins no han sido probadas en gran medida, especialmente a la escala necesaria para el funcionamiento de un sistema de pago global. [...] Dan lugar a una serie de riesgos graves relacionados con las prioridades de las políticas públicas. El listón para la aprobación regulatoria será alto".

26 bancos centrales mundiales y Libra

El evento en el BIS albergó 26 bancos centrales globales y el equipo detrás del proyecto Libra para evaluar los riesgos para la estabilidad financiera del proyecto. Se dice que el evento fue el primer encuentro importante entre los fundadores de Libra y los políticos globales desde que Facebook reveló sus planes para el proyecto de stablecoin el 18 de junio.

Anteriormente, Coeure estipuló que la moneda Libra no se lanzará hasta que los reguladores mundiales estén satisfechos. Dijo que debe garantizarse la seguridad de los usuarios antes de su lanzamiento, y añadió que garantizar la protección de la privacidad de los usuarios y los derechos de propiedad puede requerir una consideración significativa y un largo debate por parte de los reguladores. Coeure también alentó a los reguladores financieros a actuar con rapidez para preparar la liberación de Libra.

Respuesta del equipo de Libra

En medio de la reunión en curso entre los fundadores de Libra y los bancos centrales globales en Basilea, el CEO de Calibra David Marcus dió un paso adelante para proteger la posición de la Asociación Libra.

Marcus argumentó que el proyecto Libra no pretende formar una nueva moneda, sino más bien construir una "mejor red y sistema de pago que funcione sobre las monedas existentes" para ofrecer un valor significativo a los usuarios de todo el mundo. Destacó que no habrá creación de dinero nuevo, que "permanecerá estrictamente en manos de naciones soberanas".

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