La confianza es importante en asuntos de dinero. El dinero es un recurso valioso que puede ser utilizado para muchas cosas, incluyendo la compra de bienes y servicios, la inversión y la planificación para el futuro. Cuando confiamos en alguien, estamos dispuestos a dejar que nos maneje nuestro dinero. Esto puede ser una decisión importante, ya que nuestro dinero es una parte importante de nuestra vida.
La confianza es un factor clave en el ámbito financiero, tanto a nivel individual como colectivo. La confianza implica tener seguridad y credibilidad en las personas, las instituciones y los mercados que intervienen en las transacciones económicas. Sin confianza, se dificulta el acceso al crédito, la inversión, el consumo y el crecimiento.
Cuando una persona solicita un préstamo, necesita demostrar que es confiable y que podrá devolver el dinero en el plazo y las condiciones acordadas. De lo contrario, el prestamista le cobrará un interés más alto o le negará el crédito.
Cuando una empresa quiere captar recursos para financiar sus proyectos, necesita generar confianza en los inversionistas, mostrando que tiene una buena gestión, una estrategia clara y unos resultados positivos. De lo contrario, tendrá que ofrecer una mayor rentabilidad o asumir un mayor riesgo.
Cuando un país quiere atraer inversión extranjera, necesita generar confianza en los agentes económicos, manteniendo una política fiscal y monetaria responsable, una estabilidad política y social, y un marco jurídico y regulatorio transparente y predecible. De lo contrario, sufrirá una fuga de capitales, una devaluación de su moneda y una menor competitividad.
Cuando un inversor quiere obtener una rentabilidad de su capital, necesita confiar en el banco que le ofrece un producto financiero, como un depósito, un fondo o una acción. De lo contrario, el inversor buscará otras alternativas más seguras o rentables.
Para generar confianza en el inversor, el banco debe mostrar que tiene una solvencia suficiente, una gestión eficiente, una reputación sólida y una garantía de protección de los depósitos. De lo contrario, el banco tendrá que ofrecer una mayor rentabilidad o asumir un mayor riesgo.
Cuando la confianza en el banco se ve afectada por una crisis, una quiebra, un escándalo o una regulación adversa, el inversor puede retirar su dinero, provocando una fuga de capitales, una pérdida de valor o una quiebra del banco.
El dinero es una tecnología social. No es simplemente un objeto inanimado que guardamos debajo del colchón. Es algo dinámico. Es algo que damos y recibimos. Es algo que prestamos. Es algo que nos prestan. Es un instrumento que nos facilita trabajar con los demás en relaciones de beneficio mutuo.
El dinero es una invención humana que nos permite intercambiar bienes y servicios de forma eficiente y equitativa. No tiene valor por sí mismo, sino por el consenso social que le otorgamos. No es una cosa estática, sino que fluye constantemente entre las personas, las empresas y los países. No es un fin, sino un medio. Es una herramienta que nos ayuda a cooperar, a crear, a innovar y a prosperar. Es una expresión de nuestra confianza, de nuestra responsabilidad y de nuestra solidaridad.
La confianza financiera es la creencia de que nuestro dinero está seguro y se mantendrá seguro. Esto significa que podemos usarlo cuando lo necesitamos. Que no se esfumará. Que no se devaluará. La confianza es fundamental en todos estos intercambios. Sin confianza, el sistema monetario se derrumbaría.
La confianza financiera en la era digital es la confianza que los individuos y las empresas tienen en las instituciones financieras y los servicios financieros que se ofrecen en línea. Esta confianza es esencial para el funcionamiento de la economía digital, ya que las personas y las empresas necesitan confiar en que sus datos y su dinero están seguros cuando realizan transacciones en línea.
La tecnología blockchain es muy fiable en muchos aspectos. Pero la fiabilidad no se da por sentada. La confianza se tiene que construir. La realidad es que la gente confía cada vez más en Bitcoin, pero aún hay mucha duda. Bitcoin es una moneda digital nueva y poco conocida, y muchos no saben cómo funciona ni qué vale. Además, Bitcoin ha sufrido cambios bruscos en su precio, lo que hace pensar a algunos que es una inversión peligrosa.
La volatilidad es la medida de la variación o fluctuación de los precios de los activos financieros, como las acciones, los bonos, las divisas o las criptomonedas. La volatilidad indica el grado de incertidumbre o riesgo que existe en el mercado. A mayor volatilidad, mayor es la probabilidad de que los precios cambien de forma abrupta o impredecible. A mayor confianza, menor es la volatilidad y mayor es la estabilidad. La volatilidad es señal de desconfianza porque muestra que los inversores no tienen seguridad ni credibilidad en los activos, las instituciones o los mercados financieros. La volatilidad puede provocar pánico, especulación, pérdidas o crisis.
Pensemos en una persona que ha trabajado toda su vida y con mucho sacrificio ha logrado acumular algunos ahorros. Se trata de un dinero que va a necesitar para su retiro. ¿Qué tan seguro se sentiría colocando sus ahorros en BTC? ¿Sería una buena idea? Muchas personas dudarían en tomar una decisión así. Por ende, este es indicativo de que aún hay mucho camino por recorrer en el campo de la confiabilidad.
¿De qué forma Bitcoin beneficia a las personas sin capital?
Yo diría que la confianza, en el caso específico de Bitcoin, se puede construir con mejores productos y servicios. Se necesitan productos y servicios mejores. Por ejemplo, fondos de jubilación que controlen el riesgo de los cambios de precio con métodos que aseguren estabilidad y previsión, como futuros, opciones, seguros, diversificaciones y otras protecciones. También se necesita regulación. Y mucha educación de nivel. No hablo de las falsedades de las redes sociales. Hablo de educación financiera de nivel.
La confianza financiera en la era digital es un desafío y una oportunidad. Un desafío, porque implica adaptarse a un entorno cambiante y complejo. Una oportunidad, porque abre nuevas posibilidades de innovación y crecimiento. La confianza es la base de toda relación económica. Y la economía digital es la relación económica del futuro. Construyamos confianza financiera en la era digital. Hagámoslo juntos.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.