Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, anunció el viernes la apertura de un nuevo casino que funcionará con criptomonedas, en un país azotado por la crisis donde las salas de apuestas casi se han extinguido.

Un casino para el alivio

Maduro dijo que el Hotel Humboldt del Parque Nacional Ávila será pronto sede de un casino internacional que operará con Petro (PTR), la criptomoneda del Estado venezolano, y esa recaudación financiará los sectores de salud pública y educación del país.

El anuncio llega menos de una década después de que el mentor de Maduro, el ex presidente Hugo Chávez, ordenara el cierre de todas las casas de apuestas como puertos de prostitución, drogas y crimen. Desde 2011, cuando el entonces próspero país se ha degradado, sólo un número limitado de plataformas online han permitido a los venezolanos apostar.

¿Qué es este lugar?

Mientras que el casino parece carecer de un nombre, el enigmático anuncio viene con muchas preguntas. Maduro no indicó la fecha de apertura del casino ni la logística de cómo funcionará, ¿deben los huéspedes utilizar la Petroapp? ¿el casino tendrá cripto cajeros automáticos? ¿Cómo cobrarán los usuarios sus ganancias?

Tal vez la pregunta más conmovedora del anuncio es cómo, en un país que ahora se retrasa globalmente en la educación y sufre una estructura de salud pública destruida, ¿los fondos del criptocasino apoyarán las graves necesidades de salud pública y educación?

Dado el historial de incumplimiento de promesas por parte del gobierno venezolano en relación con el Petro, Cointelegraph aconseja a los lectores que aborden las noticias sobre el tema con escepticismo.

El poder del cripto

Como Cointelegraph reportó la semana pasada, Maduro anunció planes para que Venezuela venda las reservas, 4.5 millones de barriles de petróleo, de la compañía estatal de petróleo y gas, PDVSA, en Petro.

Según Maduro, la venta ayudará a Venezuela a "abrir caminos hacia la nueva economía" y a construir un mundo de "paz e integración de los pueblos, su felicidad y mejoramiento".

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